Varias veces he comentado respecto de la propaganda negra aplicada desde hace dos años alrededor de la figura de Manuel Martínez Garrigós, la cual ha sido aprovechada de manera perniciosa por algunos aspirantes priístas a la gubernatura para posicionarse. Lejos de defender a MMG fomentaron esos ataques o, simple y sencillamente, se hicieron patos. Y a esos frenéticos miembros de su partido se dirigió Amado Orihuela agregando: “Si permitimos este tipo de marrullerías, orquestadas por el PAN y otros grupos interesados en quebrantar el posicionamiento del PRI rumbo a las elecciones del año próximo, podría costarnos muy caro. Ante las difamaciones debemos exigir la presentación de pruebas. Y si los de enfrente no demuestran la base de sus acusaciones, que se atengan a las consecuencias, porque nosotros también sabemos defendernos”.
En lugar de abonar a la descalificación, “la cual beneficia de manera directa al PAN y a otros partidos opositores”, Orihuela Trejo insistió sobre la necesidad de que cada uno de los cuadros priístas asuma su responsabilidad y las consecuencias de sus actos. “Si Manuel (Martínez Garrigós) debe aclarar circunstancias jurídicas ante tribunales, que lo haga, pues tiene derecho a dirimir sus asuntos. Pero lo que no se vale es que los propios priístas se conviertan en enemigos de sus propios compañeros”, indicó el presidente estatal del PRI, cuyas declaraciones, muy probablemente, fueron causadas por el fuego amigo que ahora padece. Empero, para lograr su reacción fue necesario que experimentara en carne propia una mínima parte de las sistemáticas campañas de ataques que ha sufrido MMG durante dos años, haciendo a un lado su interés por conseguir la candidatura gubernamental y asumir el papel que le corresponde: el de un líder político.
Y tocante al llamado que el CEN del PRI hizo recientemente a todos los aspirantes a la candidatura gubernamental, Orihuela indicó que “fue un exhorto a tiempo para evitar una mayor polarización”. “La división únicamente beneficiaría al PAN y al resto de partidos de oposición. En lugar de mantener y permitir el clima de descalificaciones, los priístas debemos pensar en apoyar a quien resulte ser el candidato para que consiga el triunfo en las elecciones de 2012, a la vez de que privilegiamos el proyecto nacional enarbolado por Enrique Peña Nieto”, concluyó.
Cambiando de tema, me referiré a las declaraciones hechas ayer por el coronel José Herrera Chávez, secretario ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública (de él depende el recientemente certificado Instituto de Capacitación y Profesionalización del Estado), tocante al reacomodo de células delincuenciales en determinadas zonas geográficas del país, incluido el Estado de Morelos, donde algunas de ellas buscan apoderarse de “la plaza” tal como lo hicieron hace varios lustros el cártel de Sinaloa y el de los hermanos Beltrán Leyva. La posición adoptada por Herrera Chávez surgió ante los recientes hechos violentos ocurridos en Temixco, Jiutepec y Cuernavaca, hoy por hoy localidades convertidas en depósito de cadáveres. Para el influyente funcionario en materia de seguridad pública, los grupos delictivos están recurriendo a expresiones más violentas en el ánimo de demostrar quién tiene el control de “la plaza”. Sin embargo, consideró que la nueva circunstancia no ha desbordado, ni rebasará al gobierno federal, en coordinación con los otros dos niveles de gobierno. En el mismo orden de ideas, Oscar Sergio Hernández Benítez, secretario de Gobierno, indicó que no obstante el escenario de violencia que en las últimas semanas del presente año se ha agudizado y que contribuye a generar el saldo de más de 400 personas ejecutadas desde enero hasta ahora, en Morelos funcionan de manera óptima los operativos Navidad Segura y CONAGO III, orientados a la prevención de delitos y salvaguardar la integridad de los morelenses durante las fiestas decembrinas. Asimismo, a manera de justificación respecto al incremento de la violencia en fechas recientes, Oscar Sergio manifestó que el operativo Guerrero Seguro ha afectado de alguna forma u otra a Morelos. “Resentimos el efecto cucaracha”, añadió. En fin.
Luis Alberto Machuca Nava, presidente estatal del Movimiento Ciudadano (antes Partido Convergencia), se sumó ayer a las muestras de apoyo otorgadas por diversos sectores sociales y políticos al rector de la UAEM, Fernando Bilbao Marcos, quien ya fue registrado como aspirante a diputado federal y senador plurinominal del Partido de la Revolución Democrática. Empero, Machuca lo proyectó todavía mejor, como prospecto de su instituto político a la gubernatura. ¿Cómo la ven ustedes? Por otro lado comentaré que Francisco Hernández Juárez, líder nacional del Sindicato de Trabajadores Telefonistas de la República Mexicana, por el simple hecho de tener una casa en Jiutepec, pero al sentirse apoyado por el senador perredista Graco Ramírez, se apropiará de otra candidatura al Senado de la República por Morelos, despojándosela a distinguidos cuadros locales del partido del sol azteca. ¿Se quedarán cruzados de brazos? Posiblemente sí, considerando que en esa organización sólo truenan los chicharrones del legislador tabasqueño.