Al asunto de PASA sólo le faltaba un simple procedimiento: la publicación (en estrados) de la resolución tomada la semana pasada por el Primer Tribunal de Circuito con sede en Cuernavaca, la cual derrumbó cualquier acusación en contra del edil dizque por haber violado una suspensión provisional concedida al consorcio regiomontano. Eso fue básicamente lo que entrampó la postulación de Martínez Garrigós, optándose por Amado Orihuela Trejo, quien, según vemos, no las trae (ni traerá) todas consigo, amén de que su designación beneficiará sobremanera a los candidatos de enfrente. Y si no, al tiempo. Se trata del rival más débil en la contienda por la gubernatura. En el equipo del senador perredista Graco Ramírez y hasta en el mismísimo grupo gobernante de Morelos siempre hubo temor de que Manuel fuera el abanderado priísta, pero ahora el escenario les favorece.
La imposición de candidatos a determinados cargos de elección popular por el PRI nacional había sido, hasta ayer, la constante. Y ahora, la desinformación y tergiversación sobre lo que realmente ocurrió durante toda la semana pasada en la sede nacional tricolor, aunque en lo personal me llamó la atención la decisión que afectó la aspiración de la actual diputada federal por el IV distrito, Rosalina Mazari Espín, para convertirse en candidata al Senado de la República. Simple y sencillamente fue descartada por el CEN priísta, cuyos líderes olvidaron la equidad de género. Al contrario: desde las cúpulas tricolores surgió la antidemocracia y gracias a la presión del equipo de Emilio Gamboa Patrón, máximo jerarca de la CNOP, se impuso a Francisco Moreno Merino en la primera candidatura senatorial, mientras que Guillermo del Valle fue registrado en la segunda. Tocante a Del Valle se entiende su inclusión, pero no se justifica, pues se trató de una cuota otorgada al grupo encabezado por Maricela Sánchez Cortés, “ex” de muchas cosas en Morelos, cuyo nombre (y no el de Memo) siempre apareció en las encuestas en tercero o cuarto lugar, aunque siempre con los mayores indicadores negativos. Maricela decidió hacerse a un lado, presionó para que Del Valle fuera incluido en la terna encuestada para definir al candidato gubernamental, y ahora perdiendo gana mediante la postulación de su pareja. Inclusive se le ha manejado como prospecto a una diputación federal plurinominal, al igual que a Manuel Martínez Garrigós.
Por cierto, el ex alcalde anunció el sábado que irá con todo a la convención de delegados, para lo cual únicamente esperará la expedición de la convocatoria respectiva y sus reglas. Añadió MMG: “En un partido democrático donde no se cumplen los acuerdos no se le puede coartar a nadie el derecho a participar, el derecho a ir con todo. Voy a cumplir con todos los requisitos que marque la convocatoria y con su apoyo (le dijo a miles de priístas concentrados en el auditorio de Teopanzolco), como ha sido siempre, con la fuerza de la militancia, con la fuerza de los morelenses y con la fuerza del PRI voy a ganar la convención de delegados y vamos juntos a recuperar el gobierno del estado”. La postura del ex alcalde fue respaldada por conocidos miembros de la clase política priísta morelense, lo cual presagia una ruptura.
Joaquín Hendricks Díaz, presidente interino del PRI estatal, y Andrés Emilio Mendoza Kaplan, delegado especial del CEN del PRI, no reconocen que Manuel, Amado y Memo del Valle hubieran firmado un acuerdo ante el Comité Ejecutivo Nacional para aceptar que quien saliese en primer lugar en las encuestas de Mitofsky y el Grupo de Comunicación Estratégica fuera el candidato a la gubernatura, y el segundo lugar iría a la primera senaduría. Aunque MMG fue el agraciado por los estudios de opinión, le daño el “Caso PASA”. Varios políticos ortodoxos, entre ellos René Juárez Cisneros, quien ya se registró como candidato al Senado por Guerrero (faltaba más), el propio Hendricks y hasta el ex gobernador veracruzano Fidel Herrera Beltrán (uno de los gobernadores más corruptos que ha tenido el PRI), objetaron cualquier determinación judicial favorable a Manuel por el mentado asunto del consorcio regiomontano (poderosa empresa que a partir de ahora se convertirá en factor de decisiones políticas en Morelos), y lo sacaron por completo de cualquier jugada, incluso mediante amenazas personales, inclinándose por las figuras menos rentables. Nos falta conocer los premios de consolación para el resto de los doce. En fin.
Mientras tanto, y tocante a Marcos Manuel Suárez Gerard cabe comentar que se registró el sábado para contender por la candidatura panista a presidente municipal de Cuernavaca. Fue acompañado por el ex regidor municipal Pablo Aguilar Ochoa, quien se registró como prospecto a la diputación por el IV distrito. Para atestiguar el acto asistieron, además, Luis Miguel Ramírez Romero, candidato a la diputación federal por el mismo partido; Antonio Tallabs Ortega, “ex” de muchas cosas en esta entidad; Francisco Sotelo Gil, presidente de Canacintra Morelos; Omar de Lassé y Cañas, delegado de la Sedesol; la regidora Vera Sisniega Aspe y el líder ciudadano Francisco Valverde Prado, quien declinó a favor de MMSG. Ni duda cabe: será el abanderado definitivo del PAN a la alcaldía.
