Es seguro que otras entidades, por ejemplo en el norte y noreste mexicano, caracterizadas durante décadas por sus niveles de violencia, presentan más delitos dentro de las estadísticas manejadas por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP). Son regiones que por el número de habitantes y extensión territorial superan a Morelos; pero aplicando la tasa de delitos por cada 100 mil habitantes, esta pequeña porción del territorio nacional expone una problemática mayor. Así se deduce, nuevamente, tras haber consultado los datos más recientes del SNSP. Debo precisar que con relación a 2014 solo aparecen las cifras de enero y febrero. Todavía no hay datos respecto a marzo.
2.- A continuación algunas cifras importantes. Tal como lo he referido en tiempos pasados, confirmaré que el robo, en sus distintas modalidades, sigue encabezando la incidencia delictiva, aunque con algún decremento. Sin duda alguna es el delito que genera la mayor percepción de inseguridad, fundamentalmente en la zona metropolitana de Cuernavaca. En enero de 2014 se cometieron 1 mil 742 robos, pero en febrero la cantidad descendió a 1 mil 517. De esas cantidades, 734 robos ocurrieron con violencia en enero, pero en febrero la cifra bajó a 573. Robo sin violencia en enero, 1 mil ocho; en febrero 844. Robo común en enero, 1 mil 685; en febrero 1 mil 496. Robo a casa habitación en enero, 35; en febrero 25.
3.- Robo de vehículo con violencia en enero, 133; en febrero 127. Esta información revela una grave problemática, que empeora con el robo de vehículo sin violencia:955 en enero y 925 en febrero. Aunque hay una pequeña reducción, el delito sigue implacable. El asalto a transeúntes registró en enero 126 delitos cometidos con violencia y 111 en febrero. Tocante al homicidio doloso, en enero hubo 42 casos y en febrero una cantidad exactamente igual; 30 con arma de fuego en enero y 18 en febrero. Extorsión: 47 en enero y 39 en febrero. No veo ninguna reducción significativa. Y viene el secuestro, el delito que peor imagen genera a Morelos: en enero se cometieron 12 plagios, pero la cantidad subió a 15 en febrero. Lo peor es que este flagelo está cundiendo entre segmentos de clase media popular y trabajadores asalariados, a lo cual me referiré posteriormente. Total de delitos del fuero común en enero de 2014: 3 mil 838. Y en febrero, 3 mil 701. Es decir, 7 mil 539 durante el pasado bimestre. Conclusión: sigue fallando la prevención del delito, a partir de las corporaciones policíacas, y la procuración de justicia, debido a la altísima impunidad en la PGJ.
3.- Cambiemos de frecuencia. La oposición en el Congreso local quiere arrebatarle al Poder Ejecutivo el control de lo que será la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente. La Procuraduría en cuestión ya existe en el papel, con recursos federales y bajo el control del gobierno mediante la Secretaría de Desarrollo Sustentable, de la que depende; pero la semana pasada el priísta Juan Carlos Rivera Hernández presentó una iniciativa para crear una nueva Procuraduría Ambiental con carácter descentralizado, independiente de la citada secretaría de despacho, lo que coincide con otra iniciativa similar introducida al Congreso desde el año anterior por el panista Javier Bolaños Aguilar. Además, Rivera busca que en la designación del titular intervenga el Congreso, el cual elegiría al procurador a partir de una terna enviada por el Ejecutivo. La primera lectura del caso es que en estos términos la dependencia sería usada por los legisladores como agencia de colocaciones. A ver.
4.- En Tlayacapan los ánimos están caldeados entre el gobierno municipal que encabeza Paulino Amaro Meza y los comerciantes del mercado que se dicen ignorados en el proyecto del nuevo mercado y quienes el viernes se enfrentaron con policías. Los fenicios quieren que mientras haya obra les reubiquen en un sitio que les garantice ventas al por mayor, algo así como una zona VIP, quizás el atrio de la iglesia, justo frente al museo donde se ubican las momias, el principal atractivo luego de las artesanías en barro y cerámica. Amaro Meza está avanzando en los trabajos de la mega obra del nuevo y moderno mercado que significará una inversión superior a los 26 millones de pesos, porque tiene la promesa de que será mano en la próxima aprobación de créditos por parte del Congreso local, el cual le autorizará cerca de 10 millones de pesos que serán la base para que le liberen el apoyo de recursos federales y estatales. La obra del nuevo mercado tiene la simpatía de los legisladores porque se mira como detonante del turismo en ese municipio que es la puerta principal de Morelos ante la zona capitalina de Xochimilco.
5.- Con la aprobación que el jueves pasado hizo el Congreso local, ya hay Comisión Estatal de Seguridad Pública y ya hay Comisionado, pues todo mundo sabe que lo será el actual encargado del despacho en la casi extinta SSP estatal, Alberto Capella Ibarra, el mismo que espera dar resultados en un plazo de cinco años. El nombramiento no es sorpresa por más que se ha tratado de encubrir, de tal manera que en aquella sesión donde fue aprobada la figura del Comisionado, el coordinador de la bancada panista sintetizó el pensar de muchos: la mayoría sabe que es un pretexto para hacerle a Capella un traje a la medida a quien, sin cumplir los requisitos de residencia previstos por la Constitución Política de Morelos, lo invitaron a venir desde Tijuana para resolver los problemas que los morelenses no pueden, según la óptica de quienes administran el más importante edificio del centro cuernavacense.
6.- Lo que mucha gente desconoce es que la cada vez más famosa Comisión Estatal de Seguridad Pública dependerá ahora de la Secretaría de Gobierno, cuyo titular Jorge Messeguer Guillén aspira a ser presidente municipal de Cuernavaca. Es decir: si con Messeguer al frente de la seguridad pública de la capital y su zona metropolitana se resuelve la implacable incidencia delictiva (durante lo que resta de 2014), sin duda alguna se convertirá en el enemigo a vencer por parte de todos los partidos políticos. Hasta podría ser candidato gubernamental en 2018. Pero convertirse en el responsable de tan delicado servicio, en caso contrario le provocará a Messeguer Guillén un peligroso daño de imagen. Tendrá ante sí un arma de doble filo, a menos que siga culpando al Ayuntamiento de Cuernavaca de la escalada delictiva, mientras no se entregue al Mando Único la policía metropolitana hoy todavía a cargo de Víctor Hugo Valdez Ortiz. A ver.