Esa evaluación y el propósito de que los resultados puedan ser satisfactorios –si es que a alguien puede satisfacer la pobreza y la inseguridad por mínima que sea- son el motor que está llevando a las dependencias federales a un activismo nunca antes visto. De hecho, los señores delegados se han comportado generalmente como virreyes que a nadie atienden en la localidad y a quienes han preocupado solo sus asuntos y negocios personales y mantener su buena relación con el gobernante en turno y con sus autoridades en el centro del país. Por eso sorprende la nueva actitud de los delegados federales que ahora, de la mano del también sorprendente joven Erick Castro Ibarra, de la Segob, y del experimentado Jorge Meade Ocaranza, se han dado a la tarea de socializar las tareas del gobierno federal en Morelos, que se están uniendo sobre los dos ejes ya citados, del combate a la pobreza y a la inseguridad.
2.- Ese novedoso trabajo de los delegados hizo que ayer acudieran a reunirse con los diputados del Congreso local, a quienes grosso modo les expusieron qué hace cada dependencia federal, como el caso de la Sedesol, de la que Meade Ocaranza les lanzó una perorata acerca de la Cruzada contra el hambre que seguro los convenció, sobre todo cuando se puso a repartir vistosos vasos colorados con el logotipo del programa social entre el priista Isaac Pimentel, el perredista Juan Ángel Flores, el panista Javier Bolaños, el pesedista Roberto Yáñez y los demás coordinadores parlamentarios que participaron en la reunión y de inmediato anunciaron su interés por combatir el hambre. Y es que los diputados acordaron al menos combatir el hambre propia y la de los delegados, porque de tanto esfuerzo institucional lo único que quedó en firme es que se reunirán de nuevo el primer día del próximo mes en la Casa Cataluña que los legisladores convertirán en restaurante para que ellos y los delegados federales desayunen opíparamente a costillas del erario. Aunque pensándolo bien, tal acción no puede ser considerada como esfuerzo para combatir el hambre si ésta se encuentra asociada a la pobreza, de la cual el Coneval señala que: “Una persona se encuentra en situación de pobreza cuando presenta al menos una carencia social y no tiene un ingreso suficiente para satisfacer sus necesidades”. Desde luego, diputados y delegados no aplican en ese supuesto social. En fin.
3.- El haber de retiro no logra consenso entre los diputados locales. El priista Matías Nazario Morales está presionando para que a los insignes magistrados se les otorguen tres millones de pesos en ese haber de retiro, mientras que su correligionaria Rosalina Mazari pretende que sean 2.5 millones, según se desprende de declaraciones hechas ayer por la responsable de la Comisión de Puntos Constitucionales y Legislación, la perredista Lucía Meza Guzmán, quien consideró que hasta el momento su propuesta es la que tiene más posibilidades de cristalizarse, misma que daría a los magistrados un haber de retiro por 900 mil pesos y la posibilidad de buscar una pensión con base en la antigüedad laboral que hayan acumulado hasta antes de ocupar la magistratura. Por lo pronto, en la negociación interbancadas lo único que los diputados han logrado es poner un techo de 1.5 millones de pesos. Obviamente, dinero del sufrido pueblo morelense.
4.- Hasta el momento de redactar la presente columna seguía el forcejeo entre algunos legisladores adscritos al Congreso local y los presidentes municipales que se niegan a actuar como títeres para aprobar de manera incondicional la reforma político-electoral a través de lo que conocemos como Congreso Constituyente. En este contexto, el grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática anunció ayer que sí acudirá al llamado que han hecho alcaldes al Congreso local para sostener una reunión hoy martes 24 de junio en las instalaciones del IDEFOMM. Así lo confirmo la coordinadora de la bancada del sol azteca en la LII Legislatura, Lucía Meza Guzmán. La legisladora cuautlense aclaró que el tema por el que se reunirán los diputados con los presidentes municipales es la reforma política, para ofrecer a los ediles una explicación amplia de la importancia de aprobar estas modificaciones constitucionales en materia electoral. El tiempo apremia, señoras y señores. La mentada reforma política deberá quedar armonizada con la legislación electoral de Morelos antes del 30 de junio. Habrá que estar atentos al resultado del encuentro de hoy, pues los presidentes municipales quieren vender caro su amor, a la manera de la aventurera. Hasta el momento de escribir la presente columna insistían en que va el voto a favor de la reforma política, pero a cambio de la autorización de nuevos créditos y refinanciamiento de deuda por parte del Congreso local.
5.- Lucía Meza Guzmán agregó que la multicitada reforma establece plazos muy limitados y advierte que si la armonización no está publicada antes del 30 de junio Morelos podría quedarse sin un órgano electoral local. Esto, desde mi particular punto de vista, ha sido una amenaza de los diputados a los presidentes municipales, con el objetivo de atemorizarlos mediante el viejo cuento de “ahí viene el coco y te comerá”. Y digo esto con conocimiento de causa, porque la reforma político-electoral que partió desde el Congreso de la Unión es avasalladora. La prueba de ello es que el Instituto Nacional de Electores ya expidió la convocatoria para elegir nuevos consejeros electorales de los Organismos Públicos Electorales Locales (OPLES) en las entidades donde el año próximo habrá elecciones, entre ellos Morelos. Así las cosas, con o sin presión de los alcaldes morelenses, el centralismo antidemocrático de este país volverá a sentar sus reales. Empero, es posible que con unidad consigan algo los presidentes municipales en materia de nuevos empréstitos. Lucía Meza concluyó diciendo que los coordinadores de los grupos parlamentarios del PRI, PSD y Nueva Alianza también acordaron asistir a la reunión con los alcaldes. A ver.
6.- Este domingo se dio a conocer la conformación de la expresión denominada “Demócratas de Izquierda”, la cual participará en el la inminente elección de consejeros estatales del PRD y luego hará lo propio para la integración del Consejo Nacional. Posteriormente, más o menos en octubre, habrá de elegirse a la nueva dirigencia del PRD en todo el país y en Morelos. Quienes hace unos días “destaparon” al actual diputado federal Javier Orihuela García como su candidato a presidente estatal del PRD se aceleraron, pues todavía no es tiempo para ello. Ellos y el ex alcalde temixquense no saben lo que hacen. Se trata de una fórmula perdedora, lo cual no es proyectado de igual manera por el grupo “Demócratas de Izquierda”, donde destacan personajes con auténtico peso específico en el PRD-Morelos. A ver.