2.- La infraestructura comprende: el adecuado equipamiento para el transporte terrestre (avenidas, carreteras o autopistas, líneas de ferrocarril y puentes); el transporte aéreo (aeropuertos con todos sus implementos); el flujo de energía: redes de electricidad (alta, media y baja tensión, transformación, distribución y alumbrado público); las redes de distribución de calor (calefacción urbana); las redes de combustibles (oleoductos, gasoductos, concentradoras, distribución); otras fuentes de energía (presas eólicas, térmicas, nucleares, etcétera); los sistemas hidráulicos (redes de agua potable, embalses, depósitos, tratamiento y distribución); redes de desagüe (alcantarillado o saneamiento y estaciones depuradoras); redes de reciclaje (recolección de residuos, vertederos, incineradoras, etcétera); infraestructura de telecomunicaciones (telefonía fija); redes de televisión de señal cerrada; repetidoras, fibra óptica y celdas de telefonía celular; y la infraestructura de usos (vivienda, comercio, industria, salud, hospitales, educación, colegios y universidades, recreación parques y jardines).
3.- Ni duda cabe: Cuernavaca padece un grave rezago en materia de infraestructura, lo que repercutió ya de manera grave. La ciudad se encuentra en decadencia por la falta de equipamiento urbano. Ayer comenté brevemente sobre el tema luego de que el Congreso local rechazó la solicitud de un empréstito turnada a dicho cuerpo colegiado por el ayuntamiento que preside Jorge Morales Barud, a fin de conseguir la reestructuración de la actual deuda pública y mejores condiciones de amortización a los pasivos heredados por los ex alcaldes Manuel Martínez Garrigós y Rogelio Sánchez Gatica. El monto solicitado por la comuna ascendía a 760 millones de pesos. Dícese en corrillos del Congreso local que algunos diputados de los grupos parlamentarios del PRD y el PAN exigieron a Morales Barud algo así como 35 millones de pesos por bancada, a cambio de darle “luz verde” al empréstito, lo cual fue rechazado por el alcalde. El lunes espero darles mayores detalles sobre el retorno del PPV.
4.- La decadencia de Cuernavaca se resume de la siguiente manera; gran parte de la ciudad cayó en deterioro o abandono. Las características del decaimiento incluyen altas tasas de desempleo, elevados índices delictivos, despoblación, paisajes desolados, edificios abandonados y familias separadas. La decadencia urbana no es por una sola causa sino por la combinación de varias, incluyendo urbanización precaria, pobreza, suburbanización y discriminación racial. La urbanización pobre incluye la construcción de nuevos asentamientos humanos en condiciones de precarismo. Casi siempre se trata de colonias irregulares cuyos moradores no disponen de servicios públicos. Esa misma gente consigue empleo precarista en el mercado laboral. Si algo caracteriza a Cuernavaca es la existencia de muchos sectores informales posesionados hoy del espacio público para sus actividades económicas ilegales. Generaron lo que muchas veces he identificado como “zonas de tolerancia” o “zonas de excepción.”
5.- Aquí ya existe el “redlining”, una práctica discriminatoria que consiste en negar o cobrar más por los servicios como la banca, los seguros, el acceso a la atención médica e incluso a los supermercados, o negar empleo a los residentes. A menudo significa segregación racial. Tiende a marcar una línea roja en el mapa para delimitar la zona donde los bancos no invierten. Esta problemática es detectable cuando ciertos servicios y el acceso a puestos de trabajo le son negados a ciertas razas o clases de personas encareciendo los costos. Las colonias donde esos sectores sociales residen tienen al precarismo como su principal característica. Y es así como surgen más factores de decaimiento urbano: altos niveles de pobreza, elevada problemática de drogadicción y alcoholismo, criminalidad y pandillerismo. En conclusión: la clase media y media alta se siente insegura viviendo aquí. Mientras el crimen aumenta, las propiedades se deprecian. Abundan edificios e inmuebles sin mantenimiento y en eventual abandono.
6.- Los diputados panistas a través de su coordinador, Javier Bolaños, lanzaron ayer una propuesta que se concatena con la recién anunciada intención del gobernador Graco Ramírez en cuanto a reformar el marco jurídico del Poder Judicial, pero que para un sector de éste debió resultar una suerte de bomba. A propósito de esas reformas que pretende el gobierno graquista, los blanquiazules señalaron. “Nosotros como legisladores de Morelos, proponemos también la desaparición del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial, en razón a que desde su creación no ha marcado ninguna diferencia en la impartición de justicia, en cambio significa un gasto burocrático y extraordinario que va en detrimento del crecimiento de la infraestructura a la cual no se destina ni el 10% del presupuesto del Poder Judicial”. De entrada, la propuesta obligará a una revisión del tema por parte de las altas autoridades del Ejecutivo estatal, de la propia magistrada presidenta Nadia Luz María Lara Chávez y del resto de las bancadas parlamentarias, donde de entrada podría ayudar al consenso la queja generalizada en cuanto a que el Legislativo ha tenido durante todo el periodo de la actual legislatura, a un representante que no representa a los diputados. A ver.
7.- Las medidas de seguridad extraordinarias que ha anunciado el presidente de la Mesa Directiva del Congreso, Juan Ángel Flores Bustamante, para celebrar con garantías la sesión de la tarde del martes en el Congreso local, ha dado vuelo a las versiones en cuanto a que la amenaza de bomba fue pura faramalla y en realidad el temor de los legisladores es otro, aunque sí tiene que ver con la seguridad de los diputados y de todos los asistentes al evento. No se prevé que la parte final de la última sesión ordinaria del periodo ordinario sea miel sobre hojuelas para los legisladores, pues al palacio legislativo podrían llegar contingentes en apoyo de las solicitudes de diversos municipios, particularmente luego de que los diputados han hecho ver que sí pueden rechazar los créditos y refinanciamientos por más que se hayan dado desgastantes reuniones de cabildeo. Lo único cierto por ahora es que la amenaza de bomba, las especulaciones posteriores y el anuncio de que el palacio legislativo será convertido en un búnker, están creando un clima de terror que da sustento a la idea de que todo ha sido planeado como un escándalo para ocultar el hecho de que los legisladores han dejado al garete a cientos de miles de habitantes de la capital morelense, al negarle la autorización del financiamiento al gobierno municipal, en un pleito que va para largo. A ver