Mismos que se elegirán en la jornada del 7 de junio de 2015. Pero también habrá de renovarse la Cámara de Diputados a nivel federal. Será importante analizar y comprobar si el PRI consiguió rentabilidad electoral mediante las reformas estructurales aprobadas a fin de mantener los gobiernos en Campeche, Colima, Michoacán, Nuevo León, Querétaro y San Luis Potosí, así como para recuperar estados hoy en poder de la oposición. El partido tricolor querrá mantener su hegemonía en la Cámara baja y aumentar su predominio en la misma. Para el caso local el tricolor vendrá por las cinco diputaciones federales actualmente bajo el control de personajes vinculados con las “izquierdas”.
2.- El PAN buscará retener las gubernaturas de Baja California Sur y Sonora, pero también reconquistar San Luis Potosí, Nuevo León y Querétaro. El PRD solo gobierna Guerrero, por lo que además de enfocar sus esfuerzos en esa entidad, apostará por recuperar Michoacán. Tocante a la Ciudad de México, PRI y PAN intentarán arrebatarle al PRD la mayoría en la Asamblea Legislativa y las delegaciones. Etcétera. Dentro de las entidades federativas todavía ubicadas en la “cuenca perredista” (Morelos entre ellas), el PRI podría aprovechar el divisionismo de la izquierda y el “choque de trenes” que se avecina entre el PRD y Morena. Respecto a Morelos, el partido tricolor querrá aprovechar las dificultades gubernamentales por la recurrente inseguridad. Me parece que la disputa por los cargos de elección popular se dividirá entre la sociedad rural y la urbana, concentrada en la zona metropolitana de Cuernavaca. Ojo con esta diferencia. Luego seguimos con el asunto.
3.- Se ha dicho hasta el fastidio que el diputado local petista Alfonso Miranda Gallegos tuvo o tiene nexos con el crimen organizado, pero nada se le ha probado. Todos los medios informativos de Morelos, sin excepción, han dado cuenta de ello, así como del parentesco del legislador con Santiago Mazari Hernández (“El Carrete”), quien además de ser su sobrino pudiera comandar un grupo criminal asentado en la zona sur de nuestra entidad y el norte guerrerense. Y justo cuando el espinoso tema se estaba transformando en leyenda (la cual le provoca estridentes carcajadas al diputado de marras), el diario Reforma publicó ayer nuevos datos sobre los supuestos vínculos de Miranda Gallegos, no solo con su consanguíneo, sino además con otros posibles miembros del crimen organizado.
4.- Dicho rotativo difundió ayer que, según un informe de seguridad “federal”, Miranda aparece en la primera línea de colaboradores de su sobrino junto con Eraclio Luna (“El Cuate”), Javier Guadarrama (“El Ángelo”) y Rubén Mazari (“El Charro”). Guadarrama -agrega la nota de Reforma- es el jefe de plaza en Jojutla, mientras que “El Cuate” es el encargado en Xochitepec. Otros integrantes de la banda, según el reporte, son Jacobo Quintana y Sergio Sánchez, jefes de plaza en Atlacholoaya. El documento de inteligencia, al que tuvo acceso Reforma, muestra un organigrama con 50 personas. En el segundo y tercer nivel de dicho organigrama están anotados jefes de sicarios y halcones del grupo como Josué González, al que apodan “El Caricias”. La banda de Mazari es responsabilizada del trasiego de drogas, secuestros, homicidios, extorsión y cobro de piso y se ubican sus lugares de operación en los municipios de Amacuzac, Puente de Ixtla, Miacatlán, Tetecala, Mazatepec y Coatlán del Río. Etcétera, etcétera. La información difundida por Reforma es harto comprometedora y contiene, insisto, datos que ha divulgado la prensa local. Empero, por la connotación nacional, la imagen del diputado Miranda Gallegos volvió a mancharse ayer una vez más. A ver.
5.- La bancada del PRI que lidera Isaac Pimentel se aprecia dispuesta a vender cara la derrota en la disputa que mantiene con el PRD y las izquierdas por el control de la Mesa Directiva del Congreso en el primer semestre del tercer año legislativo. La versión de los del sol azteca, ofrecida esta semana en voz del diputado Juan Ángel Flores, es que han logrado un compromiso con el PAN para que ese cargo sea ocupado por la aún coordinadora de su bancada, Lucía Meza, a cambio de que en el segundo semestre la titularidad de la mesa le corresponda a la panista Erika Cortés. El trato excluiría a los priistas a pesar de ser la segunda bancada en importancia y pertenecer, además, al partido que tiene el control del gobierno federal y, con ello, de las dependencias federales que operan en Morelos. Ese hecho se está poniendo sobre la mesa de debate junto con temas trascendentes a los que deberá avocarse el Congreso durante el periodo ordinario de sesiones que iniciará el 1 de septiembre, de manera destacada el Presupuesto de Egresos del Gobierno del Estado para 2014.
6.- Visto así parece que aún flota la definición de los titulares de la mesa directiva del Congreso para el año próximo, al menos en la medida que atañe a la exclusión de los tricolores. Es decir que si bien los perredistas están firmes en su decisión de hacer presidenta del Congreso a Lucy Meza, por lo menos estaría en duda la entrada del PAN a la mesa en el segundo semestre, particularmente cuando le corresponderá ocupar la presidencia de la Junta Política y de Gobierno a través de su coordinador, Javier Bolaños Aguilar. Por lo pronto los coordinadores parlamentarios tienen hasta la tarde del viernes para continuar su negociación y definir cómo se repartirán el poder al interior del Congreso, en un asunto que a su juicio es de “altísimo interés para los morelenses”, a grado tal que amerita un periodo extraordinario de sesiones. En lo que no hay vuelta de hoja es en la propuesta de Juan Ángel para designar a 2015 como el Año del Generalísimo José María Morelos; me parece que será aprobado por unanimidad. A ver.
7.- El presunto despido de un grupo de trabajadores del ayuntamiento cuernavacense que protestaron porque el Instituto de Crédito les niega el servicio debido a la falta de pago de las autoridades capitalinas, ha resultado un rico filón para los miembros de la clase política que ven en el asunto una oportunidad dorada para el golpeteo contra el alcalde Morales Barud quien, ante los inminentes tiempos electorales, es la figura objetivo en el juego del “Tírenle al negro”, que están obligados a jugar quienes pretendan hacer crecer la imagen propia con propósitos electoreros. En esa lógica se inscribe el anuncio hecho ayer por el coordinador de los panistas en el Congreso local y aspirante a la candidatura blanquiazul para la alcaldía capitalina, Javier Bolaños Aguilar, quien en un comunicado lamentó la embestida contra los trabajadores, les dio su respaldo y anunció que pedirá al Instituto de Crédito que presente las denuncias correspondientes por el incumplimiento del gobierno de Cuernavaca. Con seguridad, el asunto escalará en las semanas venideras.