El robo en sus distintas modalidades es el que mayor sensación de indefensión, inseguridad y coraje propicia entre los ciudadanos, pues a nadie agrada que lo despojen de sus pertenencias, adquiridas mediante grandes esfuerzos por el grueso de la población. Sin embargo, lo peor para el presente año todavía no aparece, gentiles lectores. Visto ya el escenario delictivo y sus causas, el pronóstico para los delitos patrimoniales durante el resto de 2015 no es halagüeño. Para reafirmar lo antes dicho es necesario que recurramos a una investigación aplicada con relación al robo en la zona metropolitana de la Ciudad de México por el Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE). Según se deduce del citado trabajo, dentro del inminente contexto económico nacional no se avizora un contexto favorable debido a dos factores: el primero es macroeconómico y el segundo inercial. La razón macroeconómica es que los delitos están fuerte y linealmente correlacionados con la inflación.

2.- Dice el CIDE: “La correlación no es simultánea, sino que está sujeta a una temporalidad o un efecto retrasado. Los aumentos en los delitos patrimoniales se asocian con incrementos en los precios de los bienes y servicios, tanto en los tres, seis, nueve y doce meses previos. Dicho de otra manera, si la inflación aumenta este mes, se verá un incremento también en el número de robos a transeúnte y casa habitación (en términos de carpetas de investigación) al menos en los tres meses siguientes, y posiblemente en adelante para el resto del año. Pero viene luego la segunda razón: la inercia de la actividad delictiva. Los incrementos en la actividad delictiva agregada son normalmente rápidos y los decrementos lentos”. Aquí yo quisiera agregar que existen otros factores que contribuyen al incremento del robo y son la falta de prevención por parte de los ciudadanos, pero sobre todo el clima de impunidad derivado de las inexistentes indagatorias a cargo de la Fiscalía General del Estado. Y también aparece lo peor: la red de complicidades entre malos elementos policíacos y las células dedicadas al robo. Casi siempre los ladrones son los mismos, quienes obtienen su libertad debido a las deficientes investigaciones del Ministerio Público. En la legislación penal de Morelos las sanciones para el robo son altas en sus variantes más graves (verbigracia el robo con violencia), pero la recurrencia del delito se debe a todo lo antes expuesto. Es un asunto multifactorial, donde también interviene la falta de empleo entre miles de jóvenes, los salarios mal pagados, pero sobre todo la falta de castigo. ¿Cómo la ven ustedes, amables lectores?

3.- Cambiemos de frecuencia. Para atender a lo que marca el decreto 1330, publicado el 23 de abril de 2014 en el Periódico Oficial “Tierra y Libertad”, ayer quedó instalado formalmente en el Congreso local el Comité Organizador del Premio al Mérito Periodístico. El galardón será entregado al celebrarse el Día de la Libertad de Expresión, el 7 de junio venidero, aunque es previsible que los legisladores elijan una fecha distinta debido a que se trata de un día inhábil, pues es domingo, y por otra parte ese día todo mundo estará muy atareado, dado que serán las votaciones de los comicios locales y federales. La intención de los legisladores es que esta vez haya apertura para que en el proceso de elección de aquellos periodistas y comunicadores a quienes se les otorgue el premio, participen los mismísimos interesados, es decir los propios periodistas a través de sus respectivas organizaciones. Tradicionalmente en estas premiaciones hay gente conforme e inconforme al final del día. A ver cómo les va.

4.- La Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil del Congreso morelense reanudó hace unos días la impartición del Curso sobre protección civil y seguridad personal, en las escuelas de educación básica de Cuernavaca. El presidente del órgano cameral, Carlos de la Rosa Segura, estima que es necesario insistir para crear una cultura de prevención y que es lamentable que en términos generales quienes integramos nuestra sociedad hacemos poco aún en materia de prevención y sólo reaccionamos ante las contingencias, por lo que se debe mantener la capacitación a niños y jóvenes estudiantes. Los cursos se ofrecen a partir de un convenio del Congreso con Capufe y el Conalep, y son alumnos de esta institución quienes lo imparten. Se han cubierto a la fecha 52 escuelas de Cuernavaca y alrededor de 25 mil alumnos.

5.- Al ser muchas las necesidades de la sociedad y poco el beneplácito frente a lo que hacen las autoridades de todos los niveles y de todos los colores, para los candidatos a cualquier cargo de elección popular es relativamente fácil encontrar argumentos para hacer su tarea de ganar las simpatías ciudadanas. Que si se requiere mayor seguridad en las calles, que hace falta mayor control sobre los vehículos del transporte público, que hay que aumentar el salario, mejorar el alumbrado público, limpiar parques y jardines, correr a los vendedores que se han adueñado de la Plaza de Armas y el Zócalo, y tal y tal. Donde piquen sale pus, y para buscar que el ciudadano se identifique con un proyecto político es fácil hablarle de esos males, y más fácil aún prometer que un nuevo partido puede venir a ser la panacea de todos los males. Lo difícil es que, andando el tiempo, los candidatos cumplan, lo que hace recordar que en la congeladora del Congreso del Estado permanecen todas las iniciativas que han intentado establecer como delito la promesa incumplida de los políticos, como la que hace un par de años impulso el abogado Cipriano Sotelo. El tema del Fraude Político se encuentra en la “congeladora” del propio Congreso.

6.- Vaya conflicto gratuito que se le generó al Ayuntamiento de Cuernavaca con relación a la aplicación del IVA sobre el concepto de saneamiento del agua distribuida por el SAPAC. Como el asunto no está lo suficientemente claro y ya generó molestia social, la comuna envió ayer una solicitud a la Procuraduría de Defensa del Contribuyente para obtener un informe a efecto de precisar la correcta aplicación del impuesto, si es que procede. La víspera se presentó la primera manifestación en contra de ese gravamen, ante lo cual fue necesario que el secretario del Ayuntamiento, Enrique Paredes Sotelo, una vez más demostrara sus oficios de torero. Sostuvo un diálogo con los ciudadanos inconformes, a quienes explicó que el cobro se derivó de una “observación” hecha por la extinta Auditoría Superior de Fiscalización, en el sentido de que al tratarse de un servicio proporcionado por el organismo descentralizado, la ausencia del cobro podría ser objeto de una observación resarcitoria en contra de los funcionarios del SAPAC. Esperemos para ver y luego diremos.