En innumerables columnas me he referido a dicha problemática que, según apreciamos frente a la creación de determinadas unidades habitacionales y la expedición de sus correspondientes licencias, no ha sido comprendida a cabalidad por las autoridades estatales y municipales en turno. Muy lejos quedaron los ideales de un desarrollo urbano sustentable, dando paso a localidades feas, caóticas y elitistas.
2.- Así como anteriormente he manejado el concepto del “ecologismo” refiriéndome a grupos no gubernamentales que se obstinan en bloquear cualquier rasgo de crecimiento y desarrollo económico, hoy he de enfocarme al “desarrollismo” urbano, ante el cual los cuernavaquenses y ciudadanos residentes en la zona metropolitana de la capital morelense habremos de colapsarnos si no se toman decisiones drásticas para frenar el modelo respectivo. Dice el Banco Mundial en un estudio titulado “Desarrollo urbano en México: contribución a una estrategia urbana nacional” (Informe Principal, 15 de julio de 2002), elaborado por la Unidad de Gerencia del Sector Privado y de la Infraestructura para América Latina y el Caribe, que “la administración de la tierra urbana es generalmente ineficaz”. “Los municipios tienen el control limitado de la división, el desarrollo urbano, la utilización del suelo y la regularización de la tierra, responsabilidades que deberían ser compartidas entre los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal). Lamentablemente, la capacidad del planeamiento es generalmente débil ante la falta de respuesta de los ayuntamientos mexicanos (…) Un tercio de la tierra en la periferia de ciudades medias y grandes está en manos de desarrolladores del sector privado. El resto de la tierra es ejidal, pudiendo ser privatizada, pero debajo de los precios del mercado y los altos estándares de desarrollo”.
3.- Varias veces me he referido al “desarrollismo” urbano. Escribí al respecto el 9 de julio de 2010 aprovechando una nota difundida por La Unión de Morelos con relación a las presiones que allá y entonces estaban recibiendo vecinos de las colonias Lázaro Cárdenas y Adolfo López Mateos, al sur de Cuernavaca, por parte de emisarios de las empresas Geo y Ara, a fin de que les vendieran sus viviendas para lograr la consolidación del distribuidor vial que hoy conocemos como “Puente Apatlaco”, del cual –por cierto- no percibimos ningún avance. Dicha vialidad, presuntamente, conducirá hacia la zona conocida como “La Loma”, en Temixco, y conectará con una nueva carretera cuyo destino será el aeropuerto “Mariano Matamoros” de Tetlama. Por aquellos días fue fácil identificar la perniciosa alianza entre malos funcionarios públicos y desarrolladores inmobiliarios. A través de esas redes de complicidades se violentan las cartas urbanas y las mínimas normas de construcción y urbanización, gracias a lo cual se han enriquecido varios presidentes municipales y demás funcionarios en turno, incluyendo a muchos de carácter estatal. Conclusión: todos los aspirantes al cargo de presidente municipal de Cuernavaca y municipios colindantes deben comprometerse con el entorno natural y evitar el “desarrollismo” urbano. A ver.
4.- Cambiemos de frecuencia. Ayer hubo pasarela en el Congreso, pero también precisiones de los titulares de los órganos de gobierno del Poder Legislativo, para poner un freno a los afanes intervencionistas que se dan desde otros poderes con el ánimo de mantener el control del Judicial, o hacerse de él. Los cinco magistrados que el 17 de julio terminan su periodo de seis años en el cargo, y que aspiran a ser ratificados por ocho años más acudieron a comparecer ante diputados para alegar sobre sus méritos para obtener la ratificación. La pasarela fue de índole privada, pero el presidente de la Junta Política y de Gobierno, Javier Bolaños, y la presidenta de la Mesa Directiva, Lucía Meza, aseguraron en sendas declaraciones a la prensa, que el proceso será diáfano y ajeno a presiones externas. Por supuesto quienes más presionan por una pronta ratificación son los propios magistrados, a quienes se les ve un marcado interés por seguir en el cargo, quizá por servir a la comunidad, o tal vez porque el salario ya los hizo enamorarse del hueso.
5.- La responsabilidad de la evaluación y el dictamen correspondiente recae en la Junta Política y de Gobierno que preside el panista Javier Bolaños, y en la que participan los coordinadores del resto de las bancadas parlamentarias. Se trata del órgano político del Congreso que debe tomar en cuenta, entre otras cosas, el impacto de sus decisiones en el ámbito político y social. Es en ese contexto que la determinación del Congreso sobre la ratificación de magistrados se retrasa en una dilación que pone nerviosos a los magistrados, pero que se explica en el propósito de excluirla de cualquier contaminación de connotaciones electorales o electoreras, y también del divisionismo interno ya perenne en el Tribunal Superior de Justicia. Tomando en cuenta que el Congreso tiene hasta mediados del mes de julio para resolver la ratificación de magistrados o la designación de otros nuevos, se infiere que los diputados deben tomar el tiempo necesario para resolver sobre quiénes serán titulares de magistraturas de aquí hasta el 2023.
6.- Mañana se reúnen en el Congreso la crema y nata de la sociedad morelense, que no son precisamente los de la clase política, o no nada más. Resulta que los diputados tienen una sesión solemne con motivo del aniversario de la creación del Estado de Morelos, y en la misma deberán coincidir los representantes de los tres Poderes, además de un nutrido grupo de hombres y mujeres destacados que engalanarán la entrega de la Medalla de Honor del Congreso de Morelos. La expectativa que parece buena, se desinfla ante la posibilidad de que una vez más, como ha ocurrido en casi todos los eventos importantes que se han realizado en esta legislatura en el Congreso local, los invitados sean objeto de la desatención, la descortesía y la ofensa de los representantes populares, que regularmente llegan tarde, retrasan el inicio del evento hasta en un par de horas y provocan el enojo y la desesperación de los convidados, con lo que a final de cuentas las ceremonias las protagoniza gente enojada y las malas vibras se sienten en el ambiente. Ojalá y esta vez sea diferente.