Matías Quiroz Medina, secretario de Gobierno, fue el encargado de presentar el documento al presidente de la Mesa Directiva del Congreso morelense, Francisco Moreno Merino, quien estuvo acompañado por Hortencia Figueroa Peralta, presidenta de la Junta Política y de Gobierno del mismo cuerpo colegiado. He aquí los nombres propuestos por el titular del Poder Ejecutivo a los diputados locales: Javier Pérez Durón, actual encargado del despacho en la Fiscalía General; Adriana Pineda Fernández, hoy fiscal titular de la Unidad Especializada en Combate al Secuestro (UECS); y Norma Angélica Toledo Camacho, directora general de Derechos Humanos en la misma institución. Me parece que la designación de nuestros ínclitos legisladores se dará entre Pérez Durón y Pineda Fernández, sin que mi comentario pretenda subestimar los valores de la fémina colocada en tercer plano. Y creo que Javier Pérez Durón será el elegido, simple y sencillamente porque conoce a la perfección todo el entramado de tan conflictiva dependencia, donde lleva trabajando alrededor de dos décadas.
2.- A reserva de que se informe oficialmente, el Congreso local podría sesionar el lunes 7 de septiembre para llevar a cabo la sesión que ni siquiera inició este jueves, cuando las actividades legislativas se paralizaron ante la falta de acuerdos para integrar 28 comisiones y dos comités. Ayer entrevisté a Julio Yáñez Moreno, diputado del PSD, quien me informó la posibilidad de que el lunes se realice la sesión. Sin embargo, la convocatoria definitiva deberá partir de la Junta Política y de Gobierno. Habrá que ver, pues, el orden del día y si la elección del nuevo fiscal general de Morelos estará incluida. Lo deseable es que tal designación no se vaya a entrampar y se envíe una señal clara, suficientemente decidida de nuestra clase política no solo al personal que integra la Fiscalía y a los miembros del foro morelense de abogados, sino al crimen organizado y a la delincuencia común, que aprovechan determinados vacíos institucionales para hacer de las suyas. Por cierto, a futuro la Fiscalía tendrá que trabajar de manera realmente coordinada con la Comisión Estatal de Seguridad Pública, a fin de bajar la incidencia delictiva… esa que aparece en los anexos estadísticos del Tercer Informe del presidente Enrique Peña Nieto. Según esa información, en 2013 se cometieron 49 mil 647 delitos en Morelos; en 2014 la cantidad fue de 48 mil 540; y desde enero a agosto de 2015 la cifra es de 29 mil 874 ilícitos de diversa índole. La tasa de delitos cometidos por cada 100 mil habitantes ha sido hasta ahora de 1 mil 555.7. A ver.
3.- Lo acaecido este jueves en el Congreso de Morelos, donde una vez más observé el comportamiento y esencia natural de nuestra clase política, me hizo recordar lo que la filósofa alemana Hannah Arendt (1906-1975) conceptualizaba sobre la mentira en la política. Arendt recuerda ese “pequeño” defecto humano en su libro “Entre el pasado y el futuro”, capítulo “Verdad y política” (editorial Península, Barcelona, 1996). Resumió así el problema: “La reescritura de la historia y la fabricación de imágenes sobrecogedoras son lo propio de todos los gobiernos. Me refiero a los estragos de la manipulación de masas”. Es decir: los montajes escénicos frente a las condiciones de pobreza y agravios sociales. Y de la misma forma he escrito con respecto a la obra de la socióloga y escritora Sara Sefchovich, investigadora del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), autora del libro “País de mentiras”. Ahí analiza la mentira convertida en eje del discurso público y conducta de los políticos, funcionarios y gobernantes. Sefchovich: “Prefieren engañarnos y mentirnos que reconocer sus errores y fracasos”. Cualquier parecido con situaciones actuales no es mera coincidencia, sino la lamentable realidad nacional. Así de que dentro del contexto de realidad política nacional los flamantes diputados locales, básicamente quienes se insertan en la denominada “chiquillada”, no pueden decirse engañados si alguien no les cumplió ciertos acuerdos. Deben acostumbrarse a la aplicación frecuente del dicho mexicano “del plato a la boca se cae la sopa”.
4.- Lo hemos visto en muchas legislaturas y el jueves se repitió la historia. Para nosotros es algo normal y no tenemos que ir muy lejos por precedentes, pues varios de los actuales actores vivieron muy de cerca el manejo tortuoso que desde la titularidad del Poder Ejecutivo en el periodo 2006-2012 tuvo Marco Adame Castillo con las legislaturas 50 y 51. A las pruebas me remito. La presunta intervención del Ejecutivo y de las dirigencias nacionales y estatales del PRI, PAN y PNA fueron los factores principales del oso que protagonizaron los diputados locales el jueves al no poder sesionar y ver derribados los escasos acuerdos que habían logrado. Espero que los flamantes legisladores hayan aprendido su primera lección y acepten su minoritaria realidad. Así es esto. Y ayer se alejaron de los reflectores para continuar sus negociaciones sin testigos incómodos, adelantando que será el lunes cuando estén en condiciones de celebrar, finalmente, la primera sesión ordinaria de la legislatura 53. Uno de los diputados más encolerizados fue el pesedista Julio Yáñez Moreno, simple y llanamente porque no le respetaron (desde los órganos internos de control) su colocación como presidente de la Comisión de Gobernación y Gran Jurado, para la cual, desde mi particular punto de vista, no tiene el perfil. A ver.
5.- El diputado panista Alberto Mojica Linares será uno de los que más reflectores tendrá en el primer periodo de sesiones de la legislatura 53, que no logra comenzar.
Antes, apenas se normalice la labor de los diputados, el blanquiazul ya adelantó que se pondrá a trabajar en la solicitud de refinanciamiento presentada por el Ayuntamiento que encabeza el alcalde Jorge Morales Barud, y en las de otros municipios igualmente desesperados porque les sea autorizado un salvavidas financiero. Los proyectos financieros deberán ser entregados por el Poder Ejecutivo al Legislativo a más tardar el 1 de octubre venidero.