En lo que se refiere a proyectos de gran alcance, todo indica que sólo se trabajará en su cabal conclusión, ya no hay tiempo para nuevas propuestas, y ciertamente se quedaron esperando continuidad de acciones de trascendencia como el frustrado intento de continuar con la construcción de la autopista Siglo XXI, ésa que fue diseñada durante los cuatro años de gestión de Jorge Carrillo Olea.
Qué decir del libramiento norponiente del que se habló mucho en el periodo de Sergio Estrada Cajigal Ramírez, pero para el que nunca se pudo siquiera liberar el derecho de vía, y ahí continuamos detenidos.
Bueno, el diputado federal priista Manuel Agüero Tovar sostiene que la representación de Morelos en la Cámara baja logró casi 300 millones de pesos para tal libramiento, pero en realidad ya no hay ni intentos de insistir en ese proyecto.
Además, con ese dinero no se hace ni el arranque. Estamos hablando de una obra que cuesta por arriba de los tres mil millones de pesos, y mire que al igual que la autopista Siglo XXI sería una carretera alternativa ideal, si se desarrollara conforme a la propuesta original.
En su oportunidad se mencionó que si algún rubro tendría impulso en ese sexenio, tanto estatal como federal, sería la mejora estructural de la red carretera. No negamos que se desarrollaron ampliaciones a cuatro carriles y algunos tramos nuevos.
Es así que desde los primeros niveles de gobierno se menciona ya sólo continuar con inversiones como el parque tecnológico, instalado muy cerca del centro de convenciones en Xochitepec; una siguiente etapa en lo referente a la modernización del aeropuerto Mariano Matamoros.
Igualmente se está ya en la fase del equipamiento del nuevo Hospital del Niño Morelense que se ubica en el municipio de Emiliano Zapata, en aquel corredor al que le dio vida precisamente JCO con la instalación del Desarrollo Industrial Emiliano Zapata (DIEZ) y donde se construyó la Universidad Tecnológica Emiliano Zapata.
Fuera de esas tres inversiones de importancia, se antoja que ya no habrá más en lo que resta de esta gestión y por lo tanto es momento de comenzar la cuenta regresiva y analizar los alcances de la administración que como quiera que sea está llegando a su término sin mayores contratiempos.
A estas alturas de la gestión de SEC, las cosas andaban bastante mal, permeaba la amenaza de juicio político contra el ex gobernador, se hablaba de complicidades de algunos "servidores públicos" con la delincuencia organizada; un caso específico fue el de quien fuera titular de Seguridad Pública, Luis Ángel Cabeza de Vaca, aunque su arresto se dio ya en este gobierno.
De la manera que sea, Adame Castillo terminará su mandato en medio de un clima menos agitado y eso es ya una ventaja.
Pero reiteramos, el propio MAC está ya haciendo un análisis de los resultados de su ejercicio. El pasado cuatro de los corrientes, durante la colocación de la primera piedra de lo que será el bulevar Apatlaco en Temixco, aprovechó para recordarle a la concurrencia la modernización de la carretera Acatlipa-Alpuyeca, la que va de la cabecera municipal de Xochitepec hacia Chiconcuac y Santa Rosa 30 en Tlaltizapán, o las ampliaciones viales en Miacatlán hacia Mazatepec, además de hospitales, clínicas y escuelas en algunos municipios.
¿Bueno o malo? Los resultados del gobierno los valorará la ciudadanía. Nosotros lo que más le reconocemos es que está llegando a su sexto año en medio de un clima por lo menos de buen trato entre los diversos partidos y actores de las fuerzas políticas. Eso ya es ganancia.