Parece que le apostó a una posición cómoda, que sin embargo le trajo algunas críticas por inconformidad de actores que consideraron poco efectivo el papel de este organismo, en medio de un ambiente actual lleno de polémica y controversia en lo relacionado a la impartición de justicia. Y ante la inminente entrega del cargo, más de una decena de aspirantes hacen fila y forman pasarela ante los legisladores locales intentando desesperadamente ganarse su voluntad y sumar sufragios a su favor para sustituir a Fausto Gutiérrez, pero más que por vocación de servicio, por ser parte de quienes tienen el privilegio de vivir del erario público en estos momentos aciagos por los que estamos atravesando.

Pero no sólo es eso, aquí en buena parte se juega la posición que en lo futuro mantenga la Comisión Estatal ante las instituciones gubernamentales, que hasta hoy, vienen siendo las más acusadas de cometer irregularidades en el transcurso del cumplimiento de su deber.

Por eso es que ya al interior del proceso de observa que se viene metiendo mano para orientar o inclinar la balanza hacia determinados prospectos y los golpes bajos comenzaron aflorar.

Ayer, en algunos medios de dio cuenta de una supuesta manta del narco colocada en el municipio de Jiutepec, donde se buscó relacionar a uno de los que vienen buscando la CDHEM, Vicenso Dimaggio, con la delincuencia organizada y ciertos acontecimientos ocurridos en la entidad hace unos meses.

La verdad es que de acuerdo a la opinión de algunos diputados y de gente ligada a la Secretaría de Seguridad Pública, se trató de un panfleto elaborado por personajes ligados a la administración pública estatal, con la intervención de un legislador del Partido Revolucionario institucional, a quien se señala como enlace con la parte oficial.

¿Y cuál sería el objetivo de este intento de descalificación? que la administración pública estatal quiere empujar a un abogado de la región de Jojutla que se desempeñó como funcionario del área de seguridad.

Lo de ayer causó mucho enojo en buena parte de las fracciones parlamentarias del Poder Legislativo, sobre todo la del mismo PRI, porque estiman que se pretende desarrollar una especie de guerra sucia echando mano de cualquier instrumento para impedir la llegada de Enzo.

Lo ubican como el enemigo a vencer, se supone que lleva el mayor consenso de diputados, porque la mayoría priísta y los del Grupo de los Cinco (G-5) estarían sumando votos a su favor.

Y esto de la manta en un momento en que se ha vuelto muy común la aparición de esos mensajes, puede generar algunos efectos, no obstante todo indica que ya los afectados han logrado rastrear el origen de los promotores de tal agresión pública.

Pero ciertamente que resulta casual que sea en momentos como éste cuando aparece tal manta, desde la muerte de Dimitriadis a la fecha han pasado muchos meses y nunca se relacionó a Dimaggio con el suceso, más aún, en aquellos momentos desafortunados la hipótesis que corrió fue más bien respecto a que intereses ligados al ex secretario de Seguridad Pública Luis Ángel Cabeza de Vaca llevaron a la eliminación del funcionario.

Por las razones que sean, la CDHEM pareciera un pequeño pastel, sin embargo, la lucha que se está dando por lograr su control es férrea, por lo que puede representar a nivel del órgano y también porque no deja de ser un espacio de oportunidad para manejar algunos recursos en beneficio de quienes logren el objetivo.

Pero en la guerra y en el amor todo se vale y los grupos de poder se están dando con todo por abajo de la mesa, no obstante, estimamos que la situación poco puede variar, Dimaggio Saavedra es el más fuerte, porque hasta donde sabemos, venía trabajando muy sigilosamente desde hace meses y tiene el traje casi planchado.