Algo tenía que salir mal al final del camino, todo parecía ir bastante bien, pero cuando las acciones se desarrollan con base en la aportación de inversiones de los tres niveles de Gobierno, siempre habrá aquellos que no responden y nos parece que éste es el caso que nos ocupa.
Esta arteria vial, la más transitada del estado, sufre daños permanentes por el circular de vehículos pesados, es necesario darle mantenimiento continuo, algo que no sucede, y sólo se le interviene cuando ya aquello está en destrucción total, de ahí que su rehabilitación salga más costosa.
Fue incluso necesaria la presión social para que instancias de Gobierno tomaran cartas en el asunto y debemos admitir que fue bajo un proyecto bastante completo, porque no obstante que la inversión original, que alcanzaba 300 millones de pesos, vino a menos, de todos modos se mantuvo lo más necesario, el problema es que ahora las cosas no salen.
Hace unos días el gobernador Marco Adame Castillo inauguró la parte que a su administración correspondía: el puente y distribuidor vial de Tejalpa, que por cierto y sin explicación alguna, aún no permiten su utilización, pero del modo que sea, la obra está concluida.
Al municipio de Jiutepec le corresponde todo aquello que tiene que ver con jardinería, redes eléctricas, drenajes y otros servicios de su competencia; y a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) repavimentar el tramo de Progreso a La Joya, estas dos acciones no han logrado concretarse y ello es incluso motivo de controversia entre la delegación estatal de la SCT y el ayuntamiento antes referido.
De entrada, el delegado Fidel Giménez Valdez acaba de señalar que no puede dar continuidad a las obras, porque la comuna no ha hecho lo que debe, es decir la introducción de una red de drenaje a todo lo largo de esa vía y más aún pronosticó que así como están las cosas, seguramente se reiniciará hasta entrado septiembre.
Claro, lo anterior fue también una especie de respuesta a las autoridades municipales de Jiutepec que durante el evento de inauguración del distribuidor vial de parte de Adame Castillo el lunes pasado, le echaron la bolita del retraso a la SCT, aunque todo parece indicar que son ellos los que han fallado.
Y decimos esto, porque también en lo que tiene que ver con el famoso puente y distribuidor, la comuna no aportó cabalmente su parte, el secretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas David Enrique Turner no quiso entrar en polémica ni decirlo abiertamente, pero en palabras más, palabras menos, acabó aceptando que el estado debió hacer lo que al ayuntamiento competía, a fin de no aplazar más la conclusión.
La alcaldía se excusa en que no hay dinero, sin embargo era un proyecto perfectamente planeado y analizado, de tal manera que tenía que ser un recurso presupuestal previsto, no pueden salir con que se acabó, generalmente en casos como éste los fondos se etiquetan.
Ayer, todo este embrollo provocó un terrible congestionamiento vial y quienes buscaban salir o entrar a Cuernavaca por el bulevar, la sufrieron, porque aquello está tirado, una molestia colectiva que no debiera ser si las instituciones públicas fueran más responsables con lo que les corresponde.
¿Se gastaron la lana en las elecciones, se la llevaron algunos “servidores públicos” de la comuna? Quién sabe, la cosa es que no hay de dónde echar mano para cumplir y eso es bastante grave. Aquí, reiteramos, si pensamos que el delegado de la SCT dice la verdad, porque también se la hicieron a la administración pública estatal, pero como ya se van, les interesa muy poco lo que pase.
Lo bueno es que para el caso de Jiutepec, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) volvió a ganar la elección y entonces que le dé seguimiento la próxima administración local, más aún con el apoyo del Gobierno estatal, que es del mismo instituto político, el chiste es que cumplan.
Esta es una situación muy recurrente, buena parte de todo lo que se programa al final de un Gobierno federal, municipal o estatal, entra en zona de alto riesgo, porque ya los funcionarios descuidan su trabajo y comienzan a ver hacia adelante, para poder asegurarse otra chamba e ingreso del erario público.
Los paganos serán siempre los ciudadanos, ésos que con nuestros impuestos les engordamos los bolsillos a las autoridades, sin embargo éstas consideran que a pesar de elevados sueldos y cuantiosas prebendas, nos hacen un favor al ‘sacrificarse’ en cargos de Gobierno o de representación popular.
Y mire que hay cada vival que da miedo, personajes sin escrúpulos que basan su modus vivendi en la política pero con el solo propósito de engordar sus bolsillos, sin darle a la sociedad alguna retribución que valga la pena, por eso se observa un decaimiento en la calidad de los servicios, mayor costo en todo tipo de trámites, que al final ocasionan un empobrecimiento progresivo de pueblos y comunidades, porque, en efecto, vivimos en medio de gobiernos de rapiña.
1 comentario
Hey
Estimado Daniel este servidor y muchos ciudadanos agradeceriamos dieran seguimiento al asunto… Compartelo!