Desde el inicio de la actual administración en Morelos, se pudo advertir de la tendencia en el mismo sentido, hemos asistido a eventos relacionados con la diversidad sexual y otros temas, poco o nunca abordados en el reciente pasado, pero que son ya materia de revisión para echar a caminar los cambios legales a que haya lugar.
Ayer, ese fue uno de los asuntos que generó visiones encontradas en el Congreso del estado. Por un lado, aquellos que consideran inaceptable sacrificar el desarrollo de una vida, así sea en el vientre de la madre por considerarlo un crimen y por el otro quienes piensan que la mujer es libre de decidir sobre su cuerpo. Pero igualmente, confrontaron ideas los que defienden a la institución familiar concebida entre personas de distinto sexo y los que reclaman su derecho a llevar una vida sexual entre iguales.
Estos son aspectos que van a seguir generando mucha controversia, no podemos olvidar que el sector eclesiástico defiende el derecho a la vida e irá hasta donde sea necesario para hacer valer su pensamiento. Pero del otro lado está el Gobierno local, que le apuesta a una tendencia contraria, ello pronostica incluso una interesante lucha que se irá transfiriendo al terreno electoral.
Por eso, el caso se está manejando a nivel de estrategias en cada una de las partes o sectores, se menciona por ejemplo que el Gobierno del estado no quiere verse muy descobijado y le ha pedido a la representación del Partido del Trabajo en la Cámara local que sea la instancia que meta la iniciativa de reforma para tal efecto, pero tampoco ellos desean ser “los malos de la película, sabedores de que mientras sean peras o manzanas, enfrentarán la condena de un amplio sector, sobre todo del católico.
Y en el caso de la Iglesia, pues se afirma que sabedores de lo que se venía en Morelos con el triunfo de la izquierda, se envió al obispo Ramón Castro Castro con la instrucción de reventar ese proyecto. Incluso un funcionario de Gobierno estatal indicó: “aquí ya se sabía el motivo de la llegada de este obispo, el gobernador Graco Ramírez aún así decidió enviar al secretario de Gobierno Jorge Messeguer Guillén a recibirlo, porque había que cuidar las formas, pero se tiene conciencia del rumbo que puede tomar el caso.
Como quiera que sea, por lo que se ha logrado conocer, ya la instrucción para que el PT proponga la reforma está dada, sólo es cuestión de tiempo para que las cosas se den y entonces la lucha crecerá de intensidad y aquí vamos a ver a una izquierda librar la batalla contra dos frentes: el Partido Acción Nacional (PAN) y la Iglesia Católica.
Pero igualmente aparecieron en el recinto legislativo las dos fuerzas que casi en todo libran una histórica lucha al interior del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) sección 19, los institucionales, comandados por María Eugenia Ocampo Bedolla en calidad de secretaria general y la corriente disidente.
Acá el conflicto es por la validación de la reforma educativa impulsada desde el gobierno federal, en el caso del SNTE y la negativa de los movimientos autoconsiderados democráticos. La dirigencia sindical concentró sus fuerzas desde muy temprano en la sede de la organización, de ahí salieron a las 10:30 horas hacia el Congreso para apoyar la aprobación de la misma, pero casi paralelamente llegaron los contrarios.
Bajo estas circunstancias, el acceso a la Cámara fue restringido, con el fin de que no se entorpeciera el trabajo legislativo y también para evitar posibles choques de grupos, porque en ambos temas arriba mencionados, el ambiente estaba calientito y más vale prevenir que lamentar.
No obstante y a diferencia de otros estados como Oaxaca, donde de plano se optó por rechazar la reforma educativa federal, aquí las cosas parecen resueltas, finalmente el SNTE sigue teniendo el control mayoritario de las fuerzas internas, la operación ha funcionado y a pesar de los gritos y reclamos en contra, la mesa estaba servida.
Otra cosa, insistimos, será lo relacionado al aborto y a los matrimonios entre personas del mismo sexo, ahí no vemos ninguna definición, de un lado o de otro. Finalmente el Gobierno de un estado tiene su peso y su poder, pero el sector eclesiástico maneja masas y controla ideas, la batalla pudiera ser muy pareja, de ahí que consideremos nada fácil que se logre legalizar lo que ya se dio en el Distrito Federal.
Y es que para algunos analistas, una cosa es la capital del país y otra Morelos, a pesar de que somos casi una colonia de la metrópoli, hay profundas diferencias en sus sociedades. En el estado aún subsisten muchos dogmas y hay un elevado nivel de catolicismo que rechazará cambios constitucionales en la materia, allá el comportamiento es otro, se aprecia mayor liberalismo, que facilitó las cosas.
Pero de que se va a intentar, no tenemos duda, es algo que esta administración ha estado madurando muy cuidadosamente para no acelerar a sus detractores, sin embargo, tendrá que valorarse si es o no conveniente cuando se aproxima una elección intermedia, es claro que algo así impactaría de manera decidida en el equilibrio de fuerzas electorales en la justa del 2015.
En todo caso, ya debería de agilizarse el proceso, para poder cicatrizar heridas, en el caso de los sectores de tendencia izquierdista, pero de entrada, vemos ya muy movidos a grupos identificados con la derecha, para defender la vida, como que los priistas se mantienen al margen de todo eso y finalmente pudieran ser los grandes beneficiados.
