Pero reiteramos, la capital estatal se coloca en el centro de las elecciones, es aquí donde se aprecia mayor esfuerzo por aquellas fórmulas con posibilidades reales de ganar, se ve además que existe una especie de espionaje entre ellos, para ir midiendo el alcance del adversario y en esa medida aplicar estrategias.
Hay una especie de guerra entre la fórmula priista que encabeza Maricela Velázquez Sánchez y el perredista Jorge Messeguer Guillén, sin embargo, se ven muy entretenidos mientras el futbolista Cuauhtémoc Blanco sigue sigilosamente caminando y sin mayores cuestionamientos; lo vienen desestimando y podría darles un susto.
Cada quien intenta generar inercia para tomar distancia del enemigo a vencer, por eso venimos viendo una serie de jugadas entre los más cercanos a la victoria. Ayer, Velázquez Sánchez recibió la adhesión de quien fuera el candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) a la alcaldía de Cuernavaca en las elecciones del 2012, José Luis Urióstegui Salgado, no es cosa menor.
En torno a ella se vienen conjuntando algunas corrientes interesantes: lleva el respaldo del ex gobernador Sergio Estrada Cajigal Ramírez, a través de su cuñado que va a la sindicatura municipal, pero al mismo tiempo, la acompaña la figura del otro ex gobernador, Marco Adame Castillo, porque su hijo anda en el equipo de trabajo electoral de MVS.
El aspirante a la diputación federal por el primer distrito, Fernando Martínez Cué, fue candidato a la gubernatura del estado por el frente amplio de las izquierdas, incluido el PRD, en la justa del 2006, cuando se quedó a tres o cuatro puntos de lograr vencer a Adame Castillo. Es decir, la de Maricela es una conjunción de grupos y corrientes que buscan lo que referíamos, provocar un movimiento a la alza en la recta final del trabajo de proselitismo ante los electores.
En la trinchera del otro lado continúan anunciando la adhesión de algunas células ex priistas e indudablemente cuentan con buena cantidad de recursos para buscar cualquier acción que les permita mantener el nivel de competencia. Velázquez Sánchez se mantiene en el compromiso de no abonar en el enfrentamiento, viene basando su lucha en algunas propuestas a fin de revertir el rezago y deterioro del nivel de vida.
En el caso del PRD, el candidato Jorge Messeguer Guillén ha optado por denunciar permanentemente presuntas acciones de corrupción de los tricolores y en particular habló de una información publicada en un medio de circulación nacional en la que se hace referencia a presuntas omisiones en la declaración de bienes patrimoniales de MVS. Y falta lo más fuerte, porque son los últimos días de trabajo electoral cuando se presentan los mayores inconvenientes.
La información señala, entre otras cosas, una propiedad de la aspirante tricolor que presumiblemente habría sido adquirida a un costo por debajo de su precio real y vía una inmobiliaria. Ahora se le denomina la “casa blanca” de MVS, emulando al caso de la primera dama del país, con algo similar.
Y producto de todos esos golpeteos ya se generaron reacciones al interior de algunos partidos. Recordará que hace unos días tres candidatos a diputaciones locales de Cuernavaca del Partido del Trabajo (PT), pintaron su raya frente al PRD, al considerar que les era improductivo y hasta adversa su identificación con ese instituto político.
Pues ya la dirigente estatal, Tania Valentina Rodríguez Ruiz, anunció que los baja de las candidaturas, lo que podría llevar a dejar acéfalos de candidatos de ese partido a dichos distritos, si es que, como se afirma, ya los tiempos para poder sustituirlos se han rebasado. A ese costo los estarían sacrificando, pero son secuelas de una lucha que llega a su máximo nivel.
Pero insistimos, mientras ellos protagonizan estos encontronazos, Blanco Bravo se está metiendo tranquilamente al terreno del electorado más intenso. A diferencia de los otros dos, que dedican la primera parte del día para reuniones con grupos o asociaciones y Organizaciones No Gubernamentales, él inicia desde muy temprano con recorridos por pueblos, barrios y colonias.
Tampoco requiere de ir tocando las puertas casa por casa, el mecanismo es la utilización del perifoneo previo a su visita, en el que se dan pormenores de los lugares a los que acudirá el futbolista y la gente sale sola; de esa manera se está ahorrando mucho tiempo, a fin de poder llegar al mayor número de colonias, porque muy difícilmente se llegará a todas, es corto el tiempo para el territorio a cubrir.
Claro, muy tranquilamente lanza algunos golpecillos, sobre todo en aspectos sensibles como el desempleo y la inseguridad y hasta ahora, nadie se ha querido meter con él, no le responden, eso le permite fortalecer su presencia en los sectores más bajos, que son el nicho que está buscando y que además, representan un caudal impresionante de electores.
Pero a cierta distancia aparece también el candidato de Movimiento Ciudadano, Alejandro Villarreal Gasca, que trae dos o tres cuadros con nivel de competencia, como Eduardo Galaz, con quien luchan por ganar el distrito cuatro. Es decir, realmente por la presidencia municipal de la capital del estado aparecen cuatro personajes, Maricela Velázquez Sánchez, Cuauhtémoc Blanco Bravo, Jorge Messeguer Guillén y Alejandro Villarreal Gasca. Los demás poco o nada tienen que hacer en la batalla. En el caso de partidos nuevos como el Humanista y Encuentro Social, lo más seguro es que acaben perdiendo su registro en el primer intento, porque no traen nada ni aportan interés a la contienda. Sus candidatos no pintan y además, tampoco traen con que pelear.