Las fecha acordadas para las asambleas son el 16 y 17 de diciembre, o sea, hay escaso margen de campañas, aunque lo decíamos recientemente, son acaso tres los que pueden llegar con posibilidades reales de quedarse con la dirigencia magisterial, sin embargo, hay algunos más que aparecen como posibles.

Y es que algunos de los que participaron en el movimiento de mediados del 2008  lograron destacar y comenzaron a construir cierto liderazgo, que ahora buscan capitalizar en la lucha por la dirigencia del magisterio. Uno de ellos es Carlos Flores.

Joyce Rosas es otra que busca colarse a la lista de aspirantes, ella ha sido delegada sindical en algunos estados de la República y considera tener méritos para que el CEN la palomeé y Felipe Domínguez, regidor actual en Cuernavaca, aparece como uno de los posibles, aunque comenzó a perder presencia de unos meses a la fecha.

Y desde luego, por venir con apoyo de algunos de los que pudieran influir en el proceso de elección, la secretaria de finanzas del SNTE, Gabriela Bañón va por lo suyo.

Hay algunos líderes que vienen ofreciendo algunas señales respecto hacia dónde pudiera inclinarse la balanza, porque la mayoría de aquellos que cuentan con información privilegiada no quieren soltar prenda, precisamente para que no aborte la estrategia.

Lo que sí se admite, es que el Secretario General del CEN del SNTE, Juan Díaz de la Torre, ya tiene definido al sucesor de la ahora diputada María Eugenia Ocampo Bedolla.

Pero habrá que ver cómo se dan las cosas a la hora de la verdad, porque ya comienza a trascender que vía el titular del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), Fernando Celerino Pacheco Godínez, Palacio de Gobierno busca influir; llevan su gallo por aquello de las dudas, porque no es un asunto menor, políticamente. Recordemos que el ex gobernador Marco Adame Castillo estuvo cerca de dejar la gubernatura por la presión magisterial en el 2008, en oposición al Acuerdo por la Calidad Educativa (ACE).

Bueno, hoy sabemos que incluso entregó la renuncia al gobierno federal, pero hubo disposición para evitarlo y en parte, aquellos más de 30 enviados a la entidad para desarticular las protestas se comprometieron a bajar el nivel de rijosidad y lo lograron; de esa manera MAC se salvó de la guillotina, pero ya estaba en el piso.

Por eso es que en la medida de sus posibilidades, que igual y no son muchas, el gobierno estatal tratará de jugar algunas cartas, porque si le sale, pues ya imagina usted el control que tendría sobre los maestros, que no andan muy conformes con el estado de cosas, más aún que les deben mucho dinero por prestaciones y retenciones indebidas en el caso de las empresas de financiamiento.

La decisión directa la tiene Juan Díaz, acaso escuchará algunas sugerencias y opiniones de colaboradores cercanos y de cuadros distinguidos que tiene en la entidad, sin embargo, al final, su decisión se impondrá, porque estas cosas así se manejan, tiene que haber un control absoluto a fin de ir eliminando una serie de inconvenientes que siguen presentes por el rechazo a la reforma educativa.

Claro, a su vez, todo deberá ser analizado conjuntamente con el Secretario de Educación, Aurelio Nuño, un político de mano dura, que ya lo ha demostrado en pocas semanas al frente de la dependencia, pués advirtió que a quienes faltaran a las aulas por ir a protestar en la vía pública les descontaría esos días de salario, y lo hizo en contra de 85 mil profesores.

Del mismo modo dijo que a quienes no acudieran a los exámenes de evaluación, les aplicaría la baja y fueron 200 los que ya quedaron fuera. El tipo no se anda por las ramas, viene con mucha autoridad y es que además, se perfila como uno de los aspirantes a la presidencia de la República hacia el 2018, por eso anda en campaña.

Y el SNTE en el país representa una fuerza sustancial y puede ser un amigo o enemigo clave a la hora de las elecciones, hay que lograr la pacificación total antes de que vengan los tiempos políticos hacia el siguiente proceso, de ahí que deba tener mano en el caso de la sucesión morelense.

En nuestro estado, salvo aquella revuelta del 2008, la oposición es mínima, dos o tres corrientes disidentes que conforman la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación la (CNTE) no lograron mayor consenso ahora  con la reforma educativa, son más bien Guerrero, Michoacán y Oaxaca los que siguen generándole problemas al secretario de Educación y a la dirigencia nacional del SNTE.

Sin embargo, la operación en la reestructuración de mandos de la Sección 19 va pensada en consolidar un proyecto que derive en la organización hacia los intereses y la política, que en materia educativa, se impulsa desde la Federación.

Como sucede en política partidista, Morelos no significa mucho en lo referente al magisterio, en comparación con otros estados, aquí son unos 25 mil maestros. Ya imagina usted cuantos hay en el Estado de México, por ejemplo. Fácil unos diez veces más, pero más vale tomar previsiones, porque cuando se ponen de acuerdo, pueden tirar un gobierno local. A Marco Antonio Adame lo tuvieron y si salvó el cuero fue por la intervención del gobierno federal, que era panista.