Mordidas de perro, caídas, desalojos violentos, portazos e insultos son algunas de las incidencias que han tenido que enfrentar los capacitadores electorales en su tarea de buscar y convencer a ciudadanos que resultaron sorteados para participar como funcionarios de casilla.
Al respecto, el presidente del Consejo Local del Instituto Nacional Electoral (INE) advirtió que esta tarea forma parte del proceso electoral y aseveró que impedir su desarrollo constituye un delito electoral.
Expuso el llamado a la población a que sea sensible a la tarea que realizan los capacitadores y supervisores electorales.
El vocal explicó que incluso hubo un caso en Cuernavaca donde una joven capacitadora fue echada violentamente por un hombre de un fraccionamiento; agregó que algunos capacitadores electorales han reportado que fueron mordidos por perros, así que llevan croquetas para tratar de evitar dichos incidentes.
Por su parte, consejeros locales llamaron a la ciudadanía a tomar en cuenta que la participación como funcionarios de casilla es un deber y un derecho, además de que constituye un elemento central en la construcción de un proceso democrático.