El presidente de la Barra de Abogados del Estado de Morelos, Miguel Ángel Rosete Flores, exigió al Consejo de la Judicatura un proceso imparcial, justo y sin conflicto de intereses en la designación de nuevos jueces de primera instancia y menores mixtos del Tribunal Superior de Justicia (TSJ).
El pasado 1 de diciembre, un abogado aspirante a ocupar una de las 13 plazas de jueces mixtos de primera instancia y menores del TSJ, Jorge Luis López Flores, presentó un escrito de recusación contra el magistrado y consejero de la Judicatura, Rubén Jasso Díaz, debido a que no se excusó de intervenir en el proceso de selección y designación de jueces a pesar de que uno de los candidatos a juez, Edgar Díaz Martínez, es su concuño.
Al respecto, el líder barrista consideró que los procesos de designación no deben ser contaminados con conflictos de intereses, amiguismos o viejos vicios, sobre todo en esta coyuntura social en que los ciudadanos exigen transparencia, honestidad y respeto al estado de derecho.
Afirmó que la designación de jueces no es un asunto menor para la sociedad, por el contrario, cobra relevancia en estos tiempos en que la gente está harta de la corrupción y la impunidad.
Sostuvo que el Consejo de la Judicatura está obligado a garantizar equidad e imparcialidad en el concurso de oposición convocado y, sobre todo, que los próximos impartidores de justicia sean no sólo profesionales sino que arriben al cargo sin compromisos que limiten, trunquen o inhiban su independencia jurisdiccional.
“Yo pido que el proceso no se contamine, que no haya preferencias y que realmente los morelenses tengamos jueces capacitados para impartir justicia a los morelenses. Por ellos exigimos certeza, legalidad y una selección transparente”, recalcó.
Para conocer su opinión respecto la recusación promovida en su contra, La Unión de Morelos intentó contactar vía telefónica y a través del área de comunicación social del TSJ al magistrado y consejero de la Judicatura, Rubén Jasso, pero no se obtuvo respuesta.