“Nosotros lo habíamos previsto, por eso rechazamos ser aval de algunos ayuntamientos para la contratación de los créditos, porque sabemos que hay un alto incumplimiento en las reglas y condiciones, y parece que es lo que está ocurriendo”.
“Un préstamo sólo se justifica si su propósito es destinarlo a la inversión pública. Hoy tenemos señales de que muchos de los que contrataron deuda, destinaron la mayor parte de los fondos a gasto corriente. Esto es inaceptable, pero hay quienes desde otros poderes apoyaron las peticiones”.
Actualmente es un asunto a discutir, consideró el funcionario, “en lo sucesivo será muy difícil que el Gobierno estatal avale alguna solicitud de esta naturaleza, porque no hay seriedad en los compromisos de algunos alcaldes”.
“Sin embargo, en este momento la mayoría de las presidencias municipales están endeudadas y quienes van a tener que pagar son administraciones futuras, de hecho, en casos específicos, ni los intereses se vienen cubriendo, mucho menos el capital”.
Villarreal Gasca dijo que una insistente recomendación a los alcaldes es cuidar el destino del dinero público, pero muy pocos han hecho caso, ante la insuficiencia presupuestal y hacen compromisos que hipotecan las alcaldías.
“Lo malo es que luego quieren que desde la administración pública estatal se les ayude a resolver este conflicto, están llegando a un callejón sin salida”, consideró.