Vacante sería para una mujer.

Con tan solo 55 años de edad y con un largo historial de argucias legales para sostenerse sin fundamento dos años más en el cargo, finalmente Martín Jasso Díaz dejó vacante la magistratura del Tribunal de Justicia Administrativa (TJA) y solicitó su pensión por cesantía en edad avanzada. Mientras tanto, el Pleno del TJA lo declaró "magistrado en retiro" y pidió al Congreso local una ampliación presupuestal para concederle, de ser el caso, la pensión vitalicia.

El 16 de junio Jasso Díaz presentó ante el Congreso su solicitud de pensión por cesantía en edad avanzada y seis días después, informó al Pleno del tribunal que fue resuelto negativamente el último recurso que lo sostenía en el cargo. El 28 de junio, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa dio a conocer en sus estrados que fue rechazado, por notoriamente improcedente, el último intento de Jasso Díaz para que su caso fuese atraído por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Lo anterior, porque el tribunal constitucional en julio de 2020,  al resolver la acción de inconstitucionalidad 20/2017, invalidó la ampliación del periodo de los magistrados a 20 años y sostuvo que el periodo máximo era de 14 años.

Bajo este criterio, los juzgados de distrito y los tribunales colegiados del Decimoctavo Circuito revocaron los amparos otorgados a las y  los magistrados de los tribunales Superior de Justicia y Justicia Administrativa, quienes reclamaron su derecho a la ampliación de su periodo.

Uno a uno, las y los magistrados que cumplieron sus 14 años se retiraron, pero la excepción fue Martín Jasso, quien a pesar de que su designación feneció en mayo de 2020 y de que en junio de 2021 el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa le revocó el amparo que inicialmente le fue concedido para permanecer en el cargo, el magistrado utilizó todo tipo argucias legales para prologar su permanencia en la magistratura por dos años más.

El 29 de junio, fue publicado en Periódico Oficial “Tierra y Libertad”  el acuerdo PTJA/23/2022 del Pleno del TJA, por el que ordenó comunicar al Congreso del Estado de Morelos, la ausencia definitiva del magistrado Martín Jasso Díaz, y habilitó al secretario de Estudio y Cuenta, licenciado Mario Gómez López, como magistrado en funciones de la Primera Sala y como integrante del Pleno Especializado en Materia de Responsabilidades Administrativas.

En esa sesión de Pleno también se declaró como magistrado en retiro a Martín Jasso Díaz, con lo cual el tribunal está obligado a concederle las prestaciones o beneficios complementarios de las que gocen los magistrados en activo, según lo establece 107, 108, 109, 110 y 111 del Reglamento Interior del TJA, como gastos médicos y prestaciones de protección adicional.

Además, según el reglamento, los trabajadores del tribunal deberán respetar su investidura como “magistrado en retiro”, tratarlo con atención y cortesía, y podrá formar parte del Claustro de especialistas en el Centro de Estudios, participando en los cursos, conferencias, congresos o seminarios que se realicen en materia administrativa, fiscal y de responsabilidades administrativas, por lo que se le pagará los honorarios correspondientes conforme a la suficiencia presupuestal que exista en el Fondo Auxiliar.

El acuerdo, avalado por el resto de magistrados integrantes del Pleno del TJA, estableció también que, “en razón de que el magistrado en retiro Martín Jasso Díaz, no se encuentra en la hipótesis respecto de la figura del haber de retiro, toda vez que existe un precedente similar que se encuentra previsto en el Decreto Número Dos Mil Seiscientos Nueve, publicado en el Periódico Oficial “Tierra y Libertad”, número 5593, de fecha 18 de abril del 2018; esto es, el Poder Legislativo del Estado de Morelos, concedió pensión por Cesantía en Edad Avanzada al licenciado Orlando Aguilar Lozano, reconociéndole expresamente ese derecho de seguridad social (pensión vitalicia); por lo que por similitud de criterio, no sería viable otorgar dicha prestación al ahora magistrado en retiro, ya que éste tendría abierta la posibilidad de tramitar y obtener en su caso, la pensión que considere le corresponda, razones por las cuales no es procedente otorgarle el haber de retiro”.

En consecuencia, subrayó el acuerdo, “se instruye al magistrado presidente (Joaquín Roque Cerezo González), para que efectué los requerimientos correspondientes, a fin de solicitar la ampliación presupuestal, con el objetivo de dar cumplimiento a las obligaciones recaídas al presente acuerdo”.

Un punto relevante de este acuerdo es que, al estar integrado el Pleno del TJA solo por varones, la designación de la vacante podría recaer preferentemente en una mujer, en términos del principio constitucional de paridad y de la Ley General para la Igualdad entre Hombres y Mujeres.