El Juzgado Primero de Distrito concedió al jefe universitario un amparo para efecto de que la autoridad responsables (la ASF) deje insubsistente la resolución del 31 de enero pasado pronunciada dentro del expediente ASG/UAJ/PAR/017/08-10 y emita una nueva con base en los lineamiento fijados por la autoridad federal.
Hace unos meses, Fernando Bilbao había obtenido del Juzgado Séptimo de Distrito del Centro Auxiliar de la Segunda Región un amparo para efecto de que la Auditoría Superior de Fiscalización dejara insubsistente el procedimiento administrativo ASG/UAJ/PAR/017/08-10 y emitiera una nueva resolución debidamente fundada y motivada, con la libertad de confirmar, modificar o anular la sanción.
Sin embargo, el órgano fiscalizador determinó confirmar la imposición de dos multas de ocho salarios mínimos cada una al rector de la UAEM y la reintegración de casi 34 mil pesos a la tesorería de la universidad estatal.
La ASF consideró que la rectoría no habría justificado el faltante –equivalente a la cantidad que se requirió integrar a las arcas universitarias- y como responsable del manejo del presupuesto universitario Bilbao Marcos fue sancionado.
Ante la nueva resolución del órgano fiscalizador, el jefe universitario promovió otro amparo contra la ASF, ya que señaló que le movimiento impugnado tiene plena justificación conforme a la normatividad en el uso de recursos.