La abogada y otrora encargada de la seguridad pública municipal, Adela Manzanares Alonso, entregó la corporación a la Comisión Estatal de Seguridad, que a su vez designó a Pablo Santana Vázquez como responsable de esa región.
La Policía de Puente de Ixtla contaba con 15 elementos por turno y de las seis patrullas, sólo tres estaban en operación. Ante la precaria situación, la Comisión Estatal de Seguridad sumó diez elementos estatales y regresó a las filas a seis agentes municipales que habían sido cedidos al Mando Único.
En vista de que tres de las seis patrullas no operaban por fallas mecánicas, fueron entregadas dos unidades más para reforzar las tareas de vigilancia en este municipio, ya que es uno de los de mayor preocupación para las autoridades estatales, por su colindancia con el estado de Guerrero y por ser una zona de trasiego de droga.
Con Puente de Ixtla suman un total de 23 municipios adheridos al Mando Único, de los 33 de la entidad, de los cuales en 17 opera la Comisión Estatal de Seguridad que tiene el control total de la seguridad pública y seis más están en vías de firmar el convenio y la asignación de sus respectivos mandos.
En tanto, la ex encargada de la seguridad pública municipal, Adela Manzanares Alonso, informó que analiza una propuesta para ocupar otro cargo en la administración local o, en su caso, retornar a sus actividades como abogada.