Luego de la marcha encabezada por familiares de la víctima la tarde del miércoles en el municipio de Cuautla, la fiscalía estatal emitió un comunicado en el que explicó que en todo momento apoyó y atendió las peticiones de los deudos.
Precisó que el 25 de mayo de 2013 la familia promovió la carpeta de investigación por la desaparición de Oliver, nueve días después fueron localizados en el municipio de Ayala los restos de dos personas y una de ellas resultó ser la víctima buscada, cuya identidad fue confirmada a través de pruebas genéticas y dactiloscópicas.
La fiscalía estatal aseguró que “la mamá del ahora occiso se negó a recibir el cuerpo de su hijo porque relacionaba el secuestro y asesinato con una persona muy cercana a la familia y, para el afecto de no entorpecer las investigaciones, decidió no reclamarlo, a fin de que se detuviera al o los probables responsables”.
“En todo momento el fiscal general Rodrigo Dorantes Salgado, así como autoridades a su cargo, brindaron el apoyo y accedieron a las solicitudes de la señora, entre ellas el cambio tanto del Ministerio Público como de los policías de Investigación Criminal de la región oriente, incluso que la carpeta de investigación se trabajara en la zona metropolitana”.
La institución precisó que derivado de las investigaciones, en noviembre se logró cumplimentar orden de aprehensión en contra de Juan Manuel “N”, presunto integrante del cartel "Guerreros Unidos" y uno de los sospechosos de haber perpetrado el secuestro y homicidio del comerciante cuautlense.
Agregó que durante una audiencia celebrada en la sala de juicios orales de la región oriente, la familia solicitó a la fiscalía la entrega del cuerpo de la víctima, la cual se concretó el pasado martes.