Con ocho votos a favor y siete en contra, el magistrado supernumerario Norberto Calderón Ocampo, quedó habilitado para votar en el Pleno del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), en víspera de la renovación de presidente.
De nuevo se dio un reñido debate entre dos bloques de magistrados: los que apoyaban que Calderón Ocampo fuera habilitado como magistrado numerario para cubrir la ponencia seis, que dejó vacante María Idalia Franco Zavaleta, quien no fue ratificada como magistrada por el Congreso; y los que se oponían, entre ellos, la todavía presidenta del TSJ, Nadia Luz Lara Chávez.
Los magistrados identificados como bloque disidente y que apoyaron a Calderón Ocampo, sostuvieron que el artículo 21 de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado de Morelos, establece que “los Magistrados Supernumerarios cubrirán, en el orden que el Pleno determine, las ausencias temporales de los Magistrados Numerarios, y en el mismo orden los sustituirán en el conocimiento de determinados negocios, por excusa o recusación de éstos. Adicionalmente constituirán la Sala o Salas Auxiliares cuando el Pleno así lo determine”.
Sin embargo, el otro bloque de magistrados argumentó que desde hace meses se acordó en Pleno habilitar a un magistrado numerario para cubrir la magistratura vacante en el trabajo jurisdiccional y, por lo tanto, era erróneo considerar que en sala tiene todas las prerrogativas mientras que en el Pleno se pretendía restar representatividad.
“Si un numerario supliera a otro numerario en sala, es para la operatividad de la sala, no para la operatividad de los acuerdos y determinaciones del Pleno, son dos cosas totalmente distintas, y es ahí donde se genera el problema y la confusión, porque un numerario sí puede, de acuerdo con lo que este Pleno determinó, suplir en sala a otro numerario. El problema se presenta porque un numerario no puede suplir en Pleno a otro numerario”, dijo el magistrado Andrés Hipólito Prieto, quien votó a favor de la habilitación de Calderón Ocampo como magistrado numerario, para tener voz y voto en el Pleno.
En contraparte, la magistrada presidenta del TSJ, Nadia Luz Lara Chávez, afirmó que debido a que el artículo 21 sólo prevé que los supernumerarios pueden cubrir a las ponencias numerarias por 30 días y, siendo Norberto Calderón el único magistrado supernumerario, ante las vacantes que dejaron Leticia Taboada y Guillermina Jiménez, él no podía repetir cada 30 días la suplencia, y por ello se determinó que lo hiciera un magistrado numerario.
“En esa tesitura, hasta este día que se está comentando el tema, las anteriores suplencias por magistrados de número respecto a esa ponencia seis, han sido en participación tanto en cuestiones jurisdiccionales en sala como en las votaciones en este Pleno, y no veo porqué tengamos que hacer una interpretación diferente y una propuesta diferente”, dijo.
A pesar de que hubo un receso, la discusión del tema se prolongó por más de tres horas, con una votación cerrada de ocho a favor de la habilitación como magistrado numerario de Calderón Ocampo y siete en contra, que dejó entrever los primeros visos de efervescencia y que la designación del próximo presidente podría darse también en circunstancias apretadas.