Cuernavaca, Morelos.- La lenta renovación del transporte público, tanto de “rutas” como taxis, se debe al alto costo de los combustibles. El costo elevado no genera las condiciones económicas para que los concesionarios inviertan en vehículos nuevos. A pesar de que la modernización del transporte está en la ley, no hay elementos para llevarla a cabo cada 10 años, dijo Gerardo García Salazar, presidente de radio taxi Línea Turística, quien agregó que el gobierno exigió a los concesionarios la compra de autos nuevos para obtener un permiso único o placas. Los que contaban con los recursos realizaron la compra de unidades, pero no han recibido su autorización.
Los que no lograron comprar nuevos autos, explicó García Salazar, es por la constante alza de los precios de la gasolina. “En algunas estaciones el precio está alcanzando los 19 pesos. Un chofer tiene que esclavizarse para primero sacar lo del combustible, lo de la cuenta y posteriormente su ganancia”.
Sobre más afectaciones, el presidente del radio taxi indicó que las refacciones suben de precio también y cada vez que un taxi debe ser llevado al taller, el monto a pagar aumenta. Señaló que al subir los combustibles, los afectados son los concesionarios y choferes, ya que no alcanza el dinero para cubrir gastos, por lo que pidió atención de las autoridades estatales.
Por último, García Salazar mencionó que la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT) debe comprometerse a entregar los permisos únicos acordados, a pesar de no contar con un titular, con el propósito de recuperar la inversión que los concesionarios realizaron al pagar por su autorización.