Así lo reconoce dirigente del gremio, quien señala que por la constante rotación de operadores, es difícil ejercer control sobre la calidad y capacitación; aplaude línea telefónica de quejas anunciada por la SMyT.
Mantener el control y la buena conducta de los operadores en el servicio de transporte público no es fácil; sin embargo, es obligación de los permisionarios ofrecer calidad, atención y comodidad a los usuarios, consideró el presidente de la Confederación de Radio Taxis en el estado, Víctor Lara Alarcón.
Se refirió a la disposición anunciada por la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT) en el sentido de poner a disposición de los usuarios un número en el cual pueden canalizar sus quejas y denuncias, consecuencias de un mal servicio ofrecido por los transportistas, y consideró que es una buena acción.
Luego explicó que no es nada fácil lograr una conducta correcta en la prestación del servicio, pero en lo que se refiere al de taxis, la situación es aún más complicada, y recordó que las unidades que integran una agrupación u asociación en la materia corresponden a concesionarios diferentes. Cada auto tiene un dueño y, a pesar de que existen normas a cumplir y disposiciones al interior de esas uniones, cada permisionario tiene que cuidar a sus choferes.
Pero independientemente de lo anterior, abundó, si bien se demanda de la capacitación y formación de quienes manejan los vehículos, el recurso humano es muy volátil; es decir, hay choferes que entran y salen de manera constante, no se logra mantener a cuadros durante una larga permanencia, lo que complica la situación.
Para las organizaciones, abundó Lara Alarcón, la formación de personal tiene un costo, pero es poco redituable a partir de que constantemente se tienen que estar haciendo contrataciones, para sustituir a los que se van.
A pesar de ello, el esfuerzo es siempre en ese sentido, y quienes están al frente del volante llevan la instrucción precisa de que a los usuarios hay que darles una atención y trato de amabilidad y decencia. No obstante, el que los propios usuarios dispongan de una línea telefónica para quejarse ante cualquier arbitrariedad ayuda a los empresarios para ir reduciendo el nivel en el mal servicio, destacó.
Pero estimó que –evidentemente- por tratarse de un servicio masivo, es en el sistema de “rutas” y camiones donde más se debe poner atención para garantizar calidad en el rubro.