Planean el regreso a las aulas para finales de junio y consultarán a padres de familia.

El plan de regreso a clases presenciales en nivel básico comenzará con por lo menos cien planteles educativos y cuando mucho con 300, ubicados en zonas rurales, con bajo acceso a internet. Las fechas de reanudación serán del 20 al 25 de junio y se ajustarán a los acuerdos entre directivos, maestros y padres de familia de cada plantel. El propósito es ir sensibilizando a la población e identificar aciertos y aspectos a mejorar para estar listos en inicio del próximo ciclo escolar, cuando se daría la apertura generalizada.  

La meta es lograr que se reactiven las labores en cuando menos un centenar de escuelas, desde nivel preescolar hasta secundaria y todavía está en revisión si es factible en las escuelas Normales, pero el número se podría duplicar porque  ya comenzaron las reuniones y sondeos con madres y padres en 200 planteles más, aproximadamente.  

De acuerdo con fuentes consultadas por La Unión de Morelos, sí se han llevado a cabo algunas conversaciones entre el titular del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM) Eliacin Salgado de la Paz y el sindicato magisterial y paulatinamente han avanzado.  

Conforme a documentos relacionados con dicha estrategia, algunos directores y docentes ya han sido llamados a reunión para esta semana, con el propósito de comenzar a definir la forma en la que se higienizarán las instalaciones y para afinar protocolos.  

El objetivo es que primero retornen a clases escuelas ubicadas en zonas rurales, en comunidades como La Tigra y el Zapote -en el  municipio de Puente de Ixtla- y Quilamula  y San José de Pala -en Tlaquiltenango- entre otras. 

El criterio principal será que sean escuelas con uno, dos o tres profesores, con pocos estudiantes, en poblaciones alejadas donde hay complicaciones para dar clases a distancia porque no hay internet o el acceso es malo y donde haya un bajo índice de contagios de coronavirus en activo. 

El IEBEM, a través de su estructura, es decir los directores de subsistemas, jefes de sector e inspectores,  procesa una base de datos respecto a los planteles que no tienen problema para retomar actividades en junio, es decir los que cuentan con agua potable o alguna forma de garantizar el acceso al vital líquido, los que han sido robados, pero cuya reparación sea sencilla o rápida de concretar y, sobre todo, donde hay disposición de los padres de familia.  

Los planteles que tienen males mayores serán incluidos en un catálogo, que será enviado a la Secretaría de Obras Públicas y al Instituto de Infraestructura Educativa del Estado de Morelos, para que se calendaricen las acciones necesarias con miras a que los centros escolares estén listos para el inicio del ciclo 2021-2022.  

Autoridades del IEBEM dejaron en claro que sólo se reactivarán las clases presenciales donde existe consenso, porque el retorno será voluntario.  

El anuncio hecho por el secretario de Educación Luis Arturo Cornejo Alatorre en el sentido de que el programa piloto de regreso a clases presenciales arranca el 22 de junio despertó mucha inquietud y generó confusiones.  

Por lo tanto, mandos medios y superiores del IEBEM tienen la indicación de lanzar esta semana circulares, reuniones o las acciones que sean necesarias para avanzar en dicho proceso sin premuras. El aviso a las mamás y papás se dará en tiempo y forma, porque justamente se buscará su apoyo para labores de limpieza y poner en práctica los protocolos de sanidad, señalan fuentes consultadas por La Unión de Morelos.  

La información agrega que con base en ese diálogo con la comunidad educativa se definirán las fechas. Se pretende llegar al consenso mínimo en cien escuelas y cuando mucho en 300.  

En lo que respecta a los colegios particulares, el proyecto destaca que “dependerá de las condiciones y las características de cada escuela” y esta semana habrá reuniones de jefes de sector con los colegios privados. La premisa central en esos casos, es sondear la decisión de los padres de familia.  

A pesar de que ya está cerca el cierre del ciclo escolar y el inicio de vacaciones, el propósito del plan piloto es ir generando sensibilización en la población, para que el en el próximo ciclo escolar ya se cuente con experiencia sobre los protocolos y haya claridad en la población sobre la importancia de retomar las actividades presenciales en la nueva normalidad, añadieron las autoridades consultadas.