Si falla en los pagos a la agencia perderá el vehículo y lo que ya ha liquidado.
Roberto Aldama -quien trabaja desde hace 27 años como chofer de taxi- narró que a principios del año pasado adquirió a crédito un vehículo para dejar de pagar una cuenta diaria al dueño de la unidad con el cual trabajo por muchos años.
Sin embargo -admite- no imaginó que la pandemia de covid 19 ocasionaría una crisis económica tan grande que se le complicaría reunir el dinero para pagar la mensualidad del auto nuevo.
“Afectaciones económicas tenemos muchas, primero por la competencia de los conductores que prestan el servicio de transporte por medio de las plataformas y después por la pandemia que nos ha dejado sin dinero a todos”, expresó.
A raíz de la crisis sanitaria -dijo- se ha visto en la necesidad de solicitar con sus conocidos préstamos de mil o mil 500 pesos para completar los seis mil que debe pagar cada mes por su automóvil.
“Si me hubiera imaginado que nos esperaba una crisis económica no compro el carro, porque cada mes tengo que pedir prestado para pagar mi deuda. Ya debo como 40 mil pesos porque mis ingresos en el taxi apenas alcanzan para sobrevivir”.
Además, aseguró, en la agencia le exigen pagos puntuales con la advertencia de que si no puede pagar tiene que devolver el vehículo, pero no le regresarán el dinero que entregó como enganche.
El entrevistado señaló que compró su vehículo dos meses antes de que llegara la pandemia al estado, por lo que liquidará su deuda hasta 2024.
En cuanto a su labor -contó- que la demanda en el servicio de transporte es tan escasa, que en ocasiones con mucho esfuerzo realiza cinco viajes, por los que cobra 30 pesos, ya que la mayoría son de trayectos cortos.