Ser chofer implica mucho estrés por las largas jornadas.
“Tuve la oportunidad de trabajar como checador y la aproveché después de doce años que estuve como chofer. Me gusta más estar aquí porque en la ‘ruta’ es mucho estrés y a veces son jornadas de hasta 15 horas diarias”, expresó Marcos Antonio Bahena.
Aunque los ingresos que obtiene como checador son de unos 250 pesos al día, la ventaja es que trabaja solo ocho horas, mientras que como conductor tenía que cumplir con cierto número de recorridos, por lo que su jornada se extendía bastante.
Como operador -apuntó- obtenía mejores ingresos económicos, pero tenía que trabajar más horas y tenía poco tiempo para estar con su familia.
Comentó que los primeros días de trabajo como checador fueron complicados, pues por falta de conocimientos se equivocó al momento de marcar en las tarjetas la salida a los operadores, lo que ocasionó que varias unidades salieran casi en fila.
“Hay que saber organizar un carro y saber manejar los tiempos de diferencia que debe llevar cada operador, porque si el checador se equivoca afectamos al chofer y si mandamos los carros uno tras otro hay que pagarle el viaje, que son 200 pesos, al chofer que se le dio mal la salida”.