El funcionario dio a conocer que los cinco casos de jóvenes que decidieron quitarse la vida, ocurrieron en la misma región del territorio morelense, y “constituye un llamado de alerta para las autoridades educativas y para directores de planteles de toda esa zona de Morelos”.
Aunque no precisó detalles de los casos, mencionó que el principio de ellos está relacionado con el acoso escolar al que habrían sido sometidos los estudiantes “además de otras causas”.
Dijo que se habrá de continuar con un registro más cercano y las autoridades continuarán con el acopio de información sobre este fenómeno social conocido como “bullying”, en todos los niveles educativos, pues el problema persiste no únicamente en nivel primaria, secundaria o bachillerato, sino también en universidades.
La idea, abundó el secretario, es analizar si las estrategias o programas como el de “escuela libre de violencia” son efectivas para darles continuidad, o en su defecto, poner en marcha otras.
“Es muy grave porque en este año, en un período que no pasó de dos a tres meses, cinco jóvenes se quitaron la vida, en algunos había cierto acoso, en otros diferentes situaciones, pero todos estaban en esa zona del estado”, recalcó.