Los expertos alertaron que en los últimos años, ha disminuido la edad promedio en la que los pacientes comienzan a padecer la pérdida de la capacidad auditiva. Anteriormente se observaba el desgaste en la tercera edad, hoy en día aparece comúnmente en la edad adulta.
Por lo anterior, los médicos del instituto destacaron la importancia de la prevención, especialmente en la población joven.
A través de un comunicado, la delegación Morelos del IMSS informó sobre este llamado a los jóvenes "que tienen el gusto de usar audífonos para escuchar música, a fin de que lo hagan a volumen moderado y evitar futuras lesiones que causen la pérdida auditiva".
Lo anterior debido a que el volumen alto en los audífonos provoca pérdida de la audición de manera prematura. La aparición intermitente de un zumbido en uno o ambos oídos, así como la dificultad para entender o identificar palabras en una conversación, son las primeras manifestaciones de pérdida progresiva de la audición, que hacen necesario asistir a consulta con el médico familiar.
El volumen del sonido que tolera el oído del humano es de 85 a 90 decibeles (unidad con la cual se mide el sonido), por lo que al exceder estos niveles de volumen aumenta el riesgo de perder o disminuir la percepción auditiva lateral o bilateral, así como padecer de estrés, pérdida del sueño, distracción, presión sanguínea alta y dolor en el oído interno".
La advertencia indica que "el ruido en altos decibeles destruye las células nerviosas (ciliadas) encargadas de la audición y el daño es irreversible, lo que hace necesario utilizar prótesis auditivas y medicamentos oxigenantes y vitamínicos que coadyuven a una mejor calidad para escuchar, aunque la función auditiva nunca se va a recuperar al cien por ciento”.
Los primeros síntomas relacionados con la sordera aparecen después de los 50 años de edad. Sin embargo, en personas que escuchan música con volumen alto, el desgaste auditivo comienza a los 40 años de edad", concluye el comunicado.