El coordinador general de los Servicios de Educación Básica y Normal, Fernando Pacheco Godínez, recordó que antes de que concluyera el ciclo escolar pasado, se radicaron alrededor de 40 millones de pesos a las escuelas que tienen una matrícula más grande.

La legislación en la materia establece que para evitar la obligatoriedad de las citadas cuotas a los padres de familia, el estado debe aportar recursos a los centros educativos. Por tanto, el Poder Legislativo etiquetó en el presupuesto de este año un monto equivalente a 180 pesos por cada niño matriculado en las escuelas de nivel básico, lo que suma alrededor de 62 millones de pesos.

Pese a los reclamos de padres de familia y posteriormente de diputados locales, ese dinero no se entregó en su totalidad a las escuelas; sólo se distribuyeron a algunos planteles –según la autoridad– a aquellos que concentran el mayor número de alumnos. Los 22 millones de pesos restantes aún no han sido entregados y, por tanto, no todas las escuelas recibieron ese apoyo.

Cuestionado al respecto, el funcionario estatal dejó en claro que no se va a entregar ese dinero hasta que no se reforme la citada ley de cuotas escolares. Argumentó que se necesita una modificación al ordenamiento para que éste tenga condiciones más acorde a las necesidades de los centros educativos, pues reiteró que la ley “está muy acotada, todo el procedimiento está muy sujeto a la compra de determinadas cosas, como dos escobas, dos pizarrones, por ejemplo, y eso generaba hasta rechazo en algunas escuelas, lo que no ayudó mucho. Lo que buscamos es que haya una reforma para que se pongan de acuerdo directivos de la escuela y los padres de familia sobre lo que se comprará con ese recurso económico”.

Dijo que confía en que en los próximos días del actual período de sesiones del Congreso local se aprueben esas modificaciones. 

Entrevistado en relación con las múltiples quejas de padres de familia a quienes se les condicionó la inscripción e ingreso de sus hijos a escuelas a que pagaran cuotas que iban desde los 100 pesos hasta los 500 pesos por alumno, Pacheco Godínez dijo que están abiertos algunos procesos de revisión y sanción a los directivos y maestros que fueron señalados y que pudieran haber incurrido en reincidencia, aunque no precisó cuántos.

Mencionó que el área jurídica del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos, será la que definirá qué sanción procede. Consideró que el problema es mínimo.

“Afortunadamente son muy pocas las escuelas, considerando el universo de mil 700 escuelas, la gran mayoría de directores ha estado acatando que no se pueden condicionar ni cobrar cuotas escolares, a la inscripción de los niños y jóvenes”.