Javier Bahena Cárdenas, subdirector de Escuelas Primarias del IEBEM, declaró ayer por la tarde en conferencia de prensa que la fusión de grupos es un mandato federal, que se da en función del número de alumnos y maestros en cada una de las escuelas de la entidad. “Las plazas (de maestros) las envía la Federación, y el estado tiene la obligación y responsabilidad de justificar el envío de dichas plazas, ubicando a los maestros de acuerdo con el número de alumnos que corresponde y que marca la Dirección de Planeación Educativa de la Secretaría de Educación Básica (SEP).” Destacó que desde incluso antes del ciclo escolar, se instruyó a los directores de aquellas escuelas, cuyos promedios de alumnos no alcanzaban el máximo permitido (35 como mínimo y 45 como máximo), para que se fusionaran los grupos y se liberaran a los maestros para llevarlos a donde hacen falta.
Ante la inconformidad de los padres en la Escuela “Mariano Escobedo”, que argumentan que los salones son tan pequeños que no caben alumnos que pretenden integrar, el subdirector aseguró que sí hay espacio suficiente, se hicieron dos grupos en los tres quintos años, A y B, con 42 alumnos cada uno.
“Todo nuestro respeto a los padres de familia, sin embargo su función es otra; el número de alumnos y grupos, compete únicamente a la autoridad educativa.”
Resaltó que aún hay un 30 por ciento de grupos que ordenar en el estado, lo cual se hará en los próximos meses, revisando cada una de las escuelas, los grupos y la infraestructura educativa.
“Visitaremos todas las escuelas primarias; donde detectemos que hace falta un maestro, lo enviaremos. Pero donde veamos que esté mal distribuido, lo mandaremos a otra escuela donde haga falta.”
Sostuvo que una vez que se normalice la situación, acudirá personalmente al referido plantel a checar los alumnos que están en los grupos. “Me comprometo a que si, en base a la norma, justifican más maestros, tendremos que dárselos; pero si no, tendremos que fusionar grupos.” Y dejó entrever que hay otros grupos del mismo plantel que van a fusionarse. Subrayó que con esta medida, ganan alumnos, padres y maestros, pues “se eficientizan los impuestos de los padres de familia, porque de ahí se pagan las plazas; en segundo lugar, los recursos que se obtengan con las fusiones, los llevamos a otras comunidades que necesitan maestro y los maestros obtienen ubicaciones en Escuelas de Tiempo Completo.
“Si existiera otro problema posterior al que existió, los maestros tienen la indicación del IEBEM de trabajar en sedes alternas, pero no perderemos días de clases”, concluyó.
Por otra parte, el tesorero del comité de padres de la citada escuela, Eduardo Díaz, declaró ayer que regresaron a clases, pero el problema no está resuelto y este martes podrían anunciar nuevas acciones para conseguir que les envíen un maestro para quinto año (y formar los tres grupos que estaban originalmente). Comentó que no caben los alumnos en los salones y algunos padres prefirieron retirar a sus hijos de las aulas.