Pero hay dos mil terrenos a la venta.
Jojutla.- De las alrededor de 500 hectáreas que se destinaron al Fideicomiso Lago de Tequesquitengo, en la actualidad se desconoce cuánta superficie queda aún por comercializar.
El director general del Fideicomiso, José Manuel Antonio Villarreal Gasca –quien asumió el cargo en octubre pasado, ya con la nueva administración–, reconoció que aunque hay predios en venta, no se sabe la cantidad total todavía disponible.
“Estamos haciendo revisiones, el inventario no está al 100 por ciento definido; estamos tratando de tener mayor certeza en el sentido de que los terrenos que decimos que están libres, sean realmente libres. Había algunos problemitas ahí en el sentido de que no se llevaba un buen registro de lo vendido con lo disponible”, explicó.
Reconoció que apenas se está integrando el equipo de trabajo y no sabe cuándo podrán contar con un registro real y confiable.
“Es un trabajo que lleva algún tiempo y no tenemos mucho personal”, dijo.
Villarreal Gasca destacó que también, como Fideicomiso, enfrenta añejas demandas por construcción sobre barrancas.
Sin embargo, dijo que sin ser exacto, todavía hay dos mil predios por vender de diferente superficie, que tampoco supo exactamente las dimensiones, pero sí apuntó que se va a realizar una nueva sectorización, porque no hay congruencia con los precios.
“Se pretende una nueva sectorización de las franjas del Fideicomiso; (actualmente) está dividido en la franja azul, que son los predios que están directamente al lago; luego, una franja naranja, y luego una verde. Hemos detectado que en algunas franjas verdes hay un poco más de infraestructura y en otras partes menos, y los costos no son congruentes en esos lugares. Por ejemplo, creemos que hay partes donde no hay tantos servicios y los costos son más elevados”, explicó.
Aclaró que en esta administración estatal, el Fideicomiso, que antes estaba en la Secretaría de Turismo, ahora pasó a ser parte de la Secretaría de Desarrollo Sustentable.
Señaló que actualmente están enfocados en la parte de la venta de los predios, de la regularización de los mismos y a atraer recursos para
“meterle” más infraestructura a la zona, más que realizar actividades de difusión turística.
“Los accesos al lago están muy deteriorados, la atención a las plantas de tratamiento y a las redes de conducción de agua potable, para una mejor plusvalía”, concluyó.