Ante el cierre de otras unidades.
Tlaquiltenango.- Ante el cierre de varias unidades –a causa de la pandemia– y del Centro de Rehabilitación Integral de Jojutla, se ha incrementado la demanda de la Unidad Básica de Rehabilitación (UBR) del Sistema DIF de este municipio.
La terapeuta física Valquiria Menes García comentó que debido a que varios municipios no han abierto sus UBR, prácticamente Tlaquiltenango ha absorbido esos pacientes.
Dijo que eso ha incrementado el trabajo para poder dar servicio a toda la población de éste y municipios aledaños.
Comentó que a todos los pacientes se les trata de dar atención con el equipo con el que cuentan, y en algunos casos les enseñan a tener la terapia en casa.
Aunque cuentan con termoterapia, hidroterapia, mecanoterapia –entre otras–, buscan utilizar la creatividad para no verse afectados por la carencia del equipo. Además se está trabajando en un proyecto para la habilitación de un cuarto de juegos para trabajar la rehabilitación y habilitación pediátrica.
Menes García destacó que cuentan con un especialista, que atiende los lunes por la tarde y cuentan con precios accesibles, que van de los 20 a los 50 pesos.
“El médico da una valoración, hace el expediente, el documento médico legal y comienza el tratamiento”, explicó.
Entre los padecimientos más recurrentes que llegan a la UBR están las fracturas, luxaciones, esguinces, parálisis faciales, hemiplejías, entre otras patologías.
Enfatizó que también cuentan con nutriólogo para orientar a las personas a controlar su peso con la finalidad de que cuiden sus articulaciones.