Entrevistada ayer, previo a la entrega de cheques a 103 planteles escolares de la zona sur, que recibieron 50 mil (hasta con cinco años de antigüedad en el programa) o 35 mil pesos (si llevan más de cinco años), la coordinadora reconoció que si bien este programa no resuelve todos los problemas de las escuelas, son una ayuda muy importante.
“Desde el sexenio pasado (que se creó) se ha visto que da la oportunidad a las escuelas de resolver sus problemas, tanto en infraestructura, como del aspecto educativo”.
Dijo que los planteles pueden utilizar sus recursos para hacer rehabilitaciones, comprar equipo, mobiliario, computadoras o arreglar los baños, que constantemente necesitan mantenimiento, entre otros.
Reconoció que no resuelve todos los problemas, pero “ayuda mucho”. “El testimonio de muchos directores, es que se pueden resolver problemas de años, aunque no en su totalidad”.
Aceptó también que el dinero no eleva la calidad educativa.
“Indudablemente que un programa no le va a dar por arte de magia la calidad a la escuela; quien le da la calidad, son sus integrantes. Hay planteles que no han recibido nunca un apoyo que son excelentes. Los tres niveles de gobierno han apostado para acercar a la escuela lo que puedan requerir, lo más básico, pero definitivamente, la comunidad escolar es la que hace posible la transformación, eso depende de que los integrantes tengan disposición”.