Al término de una reunión celebrada la tarde de ayer entre las autoridades municipales, encabezadas por la alcaldesa Hortencia Figueroa Peralta y el sindicato nacional azucarero, representado por su líder nacional Adrián Sánchez Vargas, quienes firmaron un convenio de colaboración para comenzar la regularización de las mil 062 viviendas e hicieron la entrega de escrituras de una cancha de futbol existente en el lugar, un grupo de vecinos comenzó a gritar e inconformarse porque aseguraron que no los tomaron en cuenta.
Gabriela Luna Torres, vecina del lugar, aseguró que no se les informó de qué se trataba la reunión y, además, les molestó ver que estaban ahí un grupo de personas que dijeron ser obreros activos y jubilados del ingenio “Emiliano Zapata”, pero no viven ahí.
Consideró que se debió realizar una reunión previa para explicar a los vecinos de qué se trata el convenio y la eventual regularización del conjunto habitacional. “La idea de escriturar no es los vecinos de la UM, es del propio Ayuntamiento”, enfatizó.
Aseguró que el problema de fondo es que quieren legitimar los predios que, desde hace algunos años, están invadidos y con lo cual los vecinos no están de acuerdo, sobre todo por la manera “tan oscura” en que se están dando. Algunas otras vecinas aseguraron que mucha gente que llegó a la reunión no radica en el lugar, por lo que consideraron que lo que se pretende es darles terrenos de esa unidad a ex obreros.
El secretario general de la sección 72 del Sindicato Nacional Azucarero, Víctor Manuel Velarde Díaz, estimó que existe confusión entre los vecinos porque el sindicato no pretende quitarles nada. “Les han metido en la cabeza que vamos a quitar terrenos y no sé qué tantas cosas, pero eso es falso”.
Expuso que está dispuesto a dialogar con los habitantes en cualquier momento, para aclarar la situación y reiteró que no pretenden quitar nada. “Lo que les estamos ofreciendo es la certeza jurídica, que ellos tengan con qué asegurar su patrimonio, que escrituren. Ya tenemos tiempo trabajando en esto. Conseguimos un notario que cobra 12 mil 780 pesos; 12 mil son para el notario y el resto para el fiduciario, banco del Bajío, para que libere el derecho al tanto”.
Por su parte, la alcaldesa Hortencia Figueroa Peralta declaró que con la firma del convenio, comienza la ruta de la regularización de la UM y darle certeza jurídica a las mil 062 viviendas, así como a otros inmuebles de uso común. “Lamentablemente se dio una situación de diferencia, en el sentido de la inconformidad que se tiene por la lotificación de la segunda etapa de la unidad”.
Consideró importante que se haya concretado con el Sindicato Nacional Azucarero, la entrega de la cancha de futbol y cada uno de los inmuebles que ocupan los planteles educativos. Dijo que con ello se da certeza jurídica para bajar más recursos federales y estatales.
Una vez que se retiraron los dirigentes azucareros, la alcaldesa se quedó a dialogar con los vecinos, quienes expusieron sus inconformidades y reseñaron que desde el trienio 2003-2006, comenzaron los problemas en la unidad cuando un grupo de ex obreros, quienes dijeron tener derecho a un predio, comenzaron a ocupar terrenos en diferentes puntos de la unidad, principalmente rumbo a la colonia Nicolás Bravo, lo que generó un conflicto con los habitantes, que persiste hoy en día.