"No es la inteligencia artificial lo que
me preocupa, es la estupidez humana."
Neil Jacobstein
La inteligencia artificial, o IA, no es algo novedoso. En realidad, convive con nosotros desde hace mucho tiempo, pero no le habíamos puesto atención. Este concepto lo he manifestado frecuentemente. Por ejemplo, el uso de Google maps, Wayze, el buscador de Google, y todos los buscadores que empleamos, todo eso es parte de la IA. Sólo que ahora se ha disparado su uso a otras áreas de la actividad humana en las que, literalmente le podemos pedir tareas específicas y ella las realiza.
La más reciente es la IA en Whatsapp, lanzada este año en México. Si se han fijado, ahora aparece un círculo azul en la barra del chtat yen la esquina inferior derecha, y, si le das click, te aparece un chat con la IA. Le puedes preguntar algo y ella te contesta. Y si lo deseas, le puedes pedir que cree una imagen, también lo puede hacer. Obvio, tienes que pedirle con detalle la imagen que quieres crear, de lo contrario, saldrá una imagen sencilla. En mi caso personal, he creado imágenes para los pensamientos que quiero reflejar en mis publicaciones en mis redes sociales y eso me ha ahorrado mucho tiempo, porque ya no tengo que buscar imágenes en internet que se adapten a lo que busco. Ahora las creo. Todo eso me ayuda a ser más eficiente en mi trabajo, además de ahorrarme mucho tiempo.
Sin embargo, la IA ha tenido una evolución muy rápida, tanto, que ahora con las aplicaciones que existen, puedes pedirle que redacte artículos, manuales, investigaciones, tareas escolares y de otro tipo, y lo que está causando es que los usuarios ya no se preocupen tanto, o en absoluto, por realizarlas, lo que significa que, eventualmente, un día dejaremos de pensar, reflexionar, cuestionar y analizar. Todo se lo dejaremos a la IA. Esto de acuerdo a las opiniones de muchas personas.
Y es que la IA ya existe en todos los ámbitos del quehacer humano. Se utiliza en la industria, desde hace muchos años, con los procedimientos automatizados en los que las máquinas realizan las actividades de una manera más eficiente y rápida que los operadores. Y ahora con la IA en materia educativa, psicológica, en el diseño, la arquitectura y las leyes, entre otras actividades del ser humano.
Hay tendencias que dicen que el trabajo humano desaparecerá y que su lugar será tomado por las máquinas.
Yo, personalmente, no lo creo. Las máquinas seguirán siendo creadas y operadas por el ser humano.
Lo que yo creo que debemos hacer, es aprender y actualizarnos en todo lo que viene. De lo contrario, si nos veremos rebasados por lo avances de la IA.
Es en materia educativa en la que estoy pre-ocupado. Muchos jóvenes actualmente están mucho más avanzados en los conocimientos de la IA que sus maestros, y aprovechando dichos avances, realizan sus actividades con el mínimo de esfuerzo, puesto que, usando dichos conocimientos, le piden a la IA que realice sus tareas. Y como muchos maestros desconocen estos avances, se ven rebasados.
El uso del ChaGPT fue una bomba desde su lanzamiento el 30 de noviembre de 2022, y, en su más reciente versión, puede ofrecer tesis doctorales muy aceptables. Obvio, todos los educadores deberían asumir que los estudiantes, todos sin excepción, usan algún tipo de chatbot de IA generativa para realizar sus trabajos escolares, y en lugar de buscar estrategias de detección para investigar quiénes los usan, deberían de implementar estrategias para su buen uso.
Y esto que menciono sólo es parte del uso de la IA en la educación. Ahora preguntémonos sobre su uso en las demás áreas del conocimiento. La IA puede ser un instrumento para el desarrollo humano y la cultura de paz que tanto necesitamos. No quiero, ni siquiera plantearlo como Vladimir Putin quien afirma que “el futuro pertenecerá a la inteligencia artificial y el primer país que la domine será el gobernador del mundo”.
Y, por cierto, ¿cómo saben ustedes si este artículo lo escribí yo o lo hizo la IA?