La vacunación contra el covid ha sido una de las claves para que los contagios y muertes por la enfermedad hayan remitido, aunque no desaparecen.
El proceso para inmunizar primero a la población más vulnerable ha tenido como principal obstáculo la falta de cumplimiento de los interesados, a quienes se ha programado por municipios y por orden alfabético de los apellidos. Incluso al principio por citas, pero todos los métodos han sido sobrepasados por el incumplimiento ciudadano.
Aún falta completar la aplicación de la segunda dosis a parte de las personas de entre 50 y 59 años, así como a los grupos de menos edad, que son más numerosos aún que los que ya recibieron la protección contra la enfermedad.
La cooperación de la sociedad es clave para que no sea necesario emplear tantos recursos en el proceso y para que no haya agitación social y desmanes que dañen a quienes son ajenos a la situación.