A menos que los diputados locales que controlan el Congreso se conviertan en cómplices -algo que nunca se puede descartar con ellos- seis de los siete consejeros del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac) han puesto en graves problemas operativos al organismo del que viven muy bien.
Pese a sus divergencias, el Poder Legislativo aprobó un exhorto en el que pide a los consejeros electorales echar abajo la reforma al reglamento interno que aprobaron hace dos semanas para otorgarse cuantiosas sumas como retiro cuando dejen el cargo.
De no hacerlo, serán rechazadas las solicitudes de ampliación presupuestal que presente el Impepac, las cuales se ha visto son necesarias para cumplir con sus encomiendas.
Como profecía cumplida, finalmente -si las cosas siguen como están y no reciben más recursos - quedará demostrado que el OPLE (Organismo Público Local Electoral, en la terminología del INE) carece de utilidad pública.
Los planes nacionales de Morena han recibido el apoyo de la ambición de los seis consejeros involucrados.