La conmemoración del 106 aniversario luctuoso de Emiliano Zapata sirvió de escenario para que Víctor Suárez Carrera, Procurador Agrario del Gobierno de México, reafirmara la perspectiva del gobierno federal de dejar atrás la visión neoliberal, “que ha propiciado el abandono, privatización, rentismo, despojo, acaparamiento, especulación y el deterioro de los recursos naturales en ejidos y comunidades agrarias”.
Su diagnóstico sobre la situación de la tierra en México es acertado, pero también es cierto que en la primera etapa de los gobiernos de la transformación, poco se hizo para contrarrestar esos vicios.
Bastaría con señalar los casos donde los dueños de la tierra tuvieron que defenderla hasta con su propia vida del propio gobierno, ante las intenciones de generar megaproyectos.
Si realmente se quiere reorganizar la tierra, en una búsqueda de paz, lo primero es reconocer que el propio gobierno, hasta hoy, ha sido partícipe de administrar todos esos vicios.