La mecánica en el trabajo (como saben tengo mi negocio en el centro de esta ciudad, al igual que mi familia) es que como somos varios integrantes de la familia que tenemos que ir al centro a administrar los negocios, no estamos yendo todos a diario; es decir nos turnamos los días para delimitar nuestro tiempo de riesgo, lo mismo con nuestro personal.
Pues el caso es que sólo llevo como dos días que me quedé en casa y mi sueño ese loco de estar todo el día acostada viendo películas no se ha podido dar :(
No, bueno el desorden que tengo en mi habitación no me ha permitido gozar de Netflix; al punto que ya empecé por cambiar el color de mis paredes. Cambié mi cama, mis cortinas, almohadas… y todavía tengo planeado hacerle un montón de cambios más. Así que descanso, descanso, no ha sido; pero que feliz que me siento con todo lo que he hecho en mi habitación, no es por nada, pero me está quedando de revista ;)
Entonces el caso y el cuento es que si sí están quedando en casa y no quieren caer en pánico por estar encerrados y que los pensamientos trágicos no nos llegue a ocuparse queridos lectores.
Hay un montón de cosas que hacer: pintar la casa, vaciar los cajones y sacar lo que no hemos usado en meses, arreglar esa blusa que se rasgó o que necesita un botón, hacer un pastel…
Vamos a ser positivos y pensemos que esto no va a durar mucho y que pronto andaremos por todos lados disfrutando del mundo.
Esta experiencia apocalíptica me ha dado la pauta a pensar muy seriamente en lo importante que es la salud: alimentación, ejercicio, cero vicios, chequeos cada año.
Lo importancia de la limpieza: lavarse las manos, de toser y estornudar con educación (tapándose con un pañuelo desechable y tirarlo inmediatamente, toser y estornudar tapando la boca con el brazo), pedirle amablemente a la gente que no escupa en la calle, que no se meten los dedos a la nariz, ni a la boca.
Y lo necesario que es tener un ahorro para emergencias. La cultura del ahorro muy poca gente la tiene, y sé que es difícil ahorrar y más en estos tiempos, pero créanme es mejor quedarse con las ganas de ese frapuchino o esa coca cola y mejor echar esas monedas al cochinito. De pesito en pesito, sin darnos cuenta, tendremos un dinerito que nos sacara de un apuro o una necesidad no planeada. Sino lo necesitamos en el presente en un futuro quién sabe.
Cada quien aprenderá algo diferente de esta vivencia, pero lo que sí tenemos en común todos, es que nos debemos respeto y por ello nos debemos de cuidar para cuidarnos todos… Ya sé que cantinflé, pero esa es la idea y me entendieron ;)
Ya saben ocúpense… Les dejo un beso a distancia, deseándoles siempre lo mejor.
Hasta la próxima.
I Love Negrito <3