Mucho más si se hiciera el milagro que el equipo que supuestamente repre4senta al país llegar a buen lugar, una situación que se antoja más de milagro que de realidad.
Sin embargo, el riesgo existe.
Y el riesgo es de que los políticos que malgobiernan éste país acaben por consolidar sus reformas involucionistas para llevar a México a caminos inéditos.
Me preocupa que tengan ganas de cambiar lso códigos penales para crminalizar la disidencia y la protesta.
En lso hechos ya se hace, pero por lo menos el marco juríco actual permite que vía la justicia federal las cosas se enderecen tarde o temprano.
Pero si terminan por cuadrar todo, como hicieron con la reforma energética (forma bonita de decirle a la venta de la principal riqueza del país) al rato no habrá escape.
Soy extremadamente optimista de lo que mi patria es capaz de hacer. Los mexicanos podemos ser los seres más solidarios e ingeniosos del mundo si nos dejan. Hoy la televisión impide que lo seamos, pero tarde o temprano la luz se hará de nuevo.
El 2014 debe ser un buen año a pesar de los pesimistas que se empeñan en señalar que luego de tanto cambio no hay remedio.
Por supuesto, será bueno en la medida en que ayudemos a que lo sea. Espero que estemos en el mismo bando.