Y eso que Peña Nieto ofreció que bajaría el precio de la gasolina y la electricidad. En realidad subirán al menos un 40 por ciento. Y para colmo nadie sabrá nunca cuál es el porcentaje real del subsidio que desaparece, pues eso lo establecen las autoridades de manera arbitraria, aunque digan que tienen bases técnicas y hasta científicas.
Gracias a todos ustedes adoradores del dios del futbol, que hicieron posible, con su entrega apasionada, que los políticos que dicen representarnos hayan agarrado valor para regalar el país en el tiempo en que "los ojos del mundo" estaban puestos en Brasil.
Ahora que comienzan a abrir los ojos de ese largo sueño seguro han visto que el ex presidente Felipe Calderón -autor casi único de una guerra sangrienta pero económicamente rentable para sus administradores- tiene su propio partido político.
Mientras en Morelos, el nuevo partido izquierdista, el Movimiento de Regeneración Nacional, o Morena, ya tiene dueños para sus principales candidaturas. O por lo menos eso proclaman quienes aseguran que ganarán esas representaciones.
Y así poco a poco, a menos de una semana de que se acabó el encanto del futbol, se acumula la dureza de un amargo despertar. Felicidades.