Esas pobres mujeres a las que las "convencieron" de ponerse en huelga de hambre para exigir una parte de los contratos de la autopista Siglo XXI representan no a sus propios intereses, sino a los de sus patrones.
Por supuesto, quienes sí se quedaron con la obra cobran lo que quieren y no lo que debería ser, lo que hace que construir infraestructura sea cada vez más caro, pues hay que sumar las comisiones que se llevan los políticos responsables de dar las autorizaciones.
Sin embargo, todos esos malandrines tienen nexos con los partidos políticos que controlan las instituciones, por lo que tienen la plena confianza de que no sólo sus intereses están a salvo de las pesquisas de la ley, sino sus propias conductas, que no siempre son las correctas.
Pobre de mi país, pero espero que algún día se den las condiciones para que los ciudadanos se organicen y sean perseverantes para reactivar las instituciones que en la teoría existen para controlar los excesos que hoy tanto nos afectan.
El Poder y La Gloria
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Puros excesos
Si el país fuera democrático y no estuviera en el control de unas cuantas manos, desde hace tiempo los dirigentes de organizaciones como la CTM , el Nuevo Grupo Sindical o la Conatrem ya estarían en la cárcel por los múltiples delitos en los que han incurrido a lo largo de sus poco edificantes carreras, y Morelos estaría a salvo de las cotidianas extorsiones de las que son víctimas lo mismo las instituciones que las empresas.
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