Casas fue acusado de usurpación de funciones e inmediatamente detenido y encarcelado. El último reporte que llegó a la Redacción de La Unión de Morelos señalaba que a las 19:00 seguía tras las rejas.
Él decidió participar voluntariamente en esa guerra y el bando contrario tiene todo el derecho de acusarlo de lo que sea.
Sin embargo, me llama la atención esa celeridad para que los policías se aparezcan y lo aprehendan. No soy abogado, pero esas cosas que empiezan a pasar no me parecen muy apegadas al espíritu de la reforma penal que puso por encima de todas las cosas la presunción de inocencia.
Y esa escena se ha repetido demasiadas veces. Como ciudadano, no quiero vivir -aunque parece que, como ustedes, estoy obligado, porque es lo que hay- en un mundo donde cualquier ligera acusación puede llevar a un ciudadano a la cárcel.
Pensé que eso hace tiempo había sido superado
Repito: no deseo entrar en el fondo del conflicto que hay en el Ayuntamiento ni en el resto de los conflictos que han terminado con detenidos, porque ese no es el tema. El tema es la facilidad con que las personas pueden perder su libertad, así sea por unas horas.
Los jueces de control de detención quizá terminen por liberar a todos aquellos cuyos acusadores no entregan pruebas contundentes, pero a esas alturas el afectado ya tiene un recuerdo imborrable en su memoria. Y no debería ser así, insisto. Y si estoy equivocado, agradecería que los abogados me lo hicieran saber. Gracias.