Ahí reconoció que la democracia en nuestro país debe seguir perfeccionándose y que hay algunos obstáculos que impiden llevarla a plenitud. Muy específicamente dijo que “existe aún mucha desconfianza social ante las instituciones electorales”, y las elecciones anteriores mostraron en ese sentido, un mayor deterioro en nuestro país, señalando que “mientras en la mayoría de los países de América Latina la confianza en resultados electorales es del orden del 37 por ciento, aquí anda en el 17 por ciento”.
Y diría que aún se tendrían que hacer modificaciones a las reformas electorales del 2014 para irla perfeccionando, de otra manera, sí existe el riesgo de la regresión autoritaria, para abundar en el sentido de que “el régimen democrático enfrenta dificultades, una de ellas, la inseguridad, pero también la pobreza, impunidad y la marginación”.
IMPEPAC, A LA MITAD DE SU PRESUPUESTO
Y como ya lo habíamos dicho en este espacio hace unas semanas, el Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (IMPEPAC), enfrenta un duro problema, insuficiencia presupuestal, porque este año recibió el 50 por ciento de recursos que solía ejercer en años anteriores.
De una partida de 24 millones de pesos, el Congreso local le asignó 12 millones de pesos en esta ocasión, lo que para consejeros y personal advierte de un posible despido masivo, en caso que no tengan respuesta positiva en su petición de ampliación presupuestal.
Uno de los consejeros recordó que ya más de 600 personas contratadas en calidad de eventuales para las elecciones anteriores, fueron dadas de baja, pero consideró que de no poder conseguir más fondos, quizás la mitad del personal que queda tendrá que correr la misma suerte, porque sólo hay ocho millones para operatividad y el resto no alcanza ni para salarios.