El argumento de algunos quejosos, es en el sentido de que algunos "recomendados" no hay dado el ancho y tienen que ser relevados, a fin de que el trabajo y los compromisos se cumplan.
Por lo menos en esta situación de análisis externo se encuentran Temixco y Cuernavaca, y entendemos que los alcaldes Nereo Bandera Zavaleta y Manuel Martínez Garrigós vienen considerando renovar mandos, asignados desde el arranque de la gestión.
En lo que corresponde a Temixco, buena parte de las presiones vienen de cuadros del propio Partido Revolucionario Institucional (PRI) y eso parece ser más preocupante.
Se menciona por ejemplo que el sistema de agua potable y alcantarillado presenta serios inconvenientes y sigue acumulando pasivos. El administrador Juan Flores Esquivel no puede con el paquete.
Al Presidente Municipal le continúa pesando el no haberse sacudido al ex secretario del Ayuntamiento y hoy asesor suyo Fernando Gutiérrez Nava, uno de los "apadrinados" por figuras del partido desde Cuernavaca.
Por cierto, ayer Nereo le ofreció un desayuno al senador panista Adrián Rivera Pérez, dizque para agradecerle sus buenos oficios de gestión a favor de esa localidad. Lo cual no ha sido bien visto por la mayoría de los priístas locales.
El caso es que el edil parece mostrar una posición muy plural. No hace mucho también asistió a una reunión del senador perredista Graco Ramírez Garrido Abreu.
Pero los políticos locales y sobre todo los tricolores están a favor de hacer una especie de limpia, a fin de mejorar el desempeño de la administración, que en su primer año es poco lo que ha ofrecido.
Otro señalamiento es en lo que corresponde a la correlación y trato que se da al interior del cabildo entre regidores y alcalde. Algunos priístas, como Agustín Benítez, mantiene una actitud crítica y de golpeteo permanente contra Nereo. Más bien son los panistas los que han optado por el trabajo en bien de la colectividad, porque el perredista David Martínez va siempre por la utilidad, pero curiosamente es uno de los mejor tratados.
Agustín Benítez es uno de tantos recomendados de la pareja ex dirigente del PRI estatal, Maricela Sánchez y Guillermo del Valle, David es hijo político de Graco Ramírez y el señalamiento es que se viene dedicando hacer negocios.
Pero no sólo al interior del cabildo se observan desajustes, también en el cuerpo de colaboradores, donde predominan compromisos que corresponden al pago de favores por apoyos en la campaña.
En lo que toca a Cuernavaca, MMG ha debido deshacerse de algunos funcionarios de primer nivel por actitudes poco honorables. Pero aún así, se advierte que será necesario aplicar a fondo la podadora, para poder oxigenar áreas que no responden a las expectativas generadas en sus nombramientos.
El propio Manuel ha tenido que salir al frente para resolver algunos problemas ante la infuncionalidad de los responsables, lo que lo lleva a desgaste político innecesario si se cuenta con equipo humano calificado.
Tanto en Temixco como en Cuernavaca se deberá hacer una profunda evaluación de los resultados entregados a la ciudadanía en el primer año de mandato, para con base en ello, hacer las correcciones y enmiendas correspondientes para acelerar el paso, porque el tiempo se reduce dramáticamente, el 2011 es ya electoral y la intranquilidad llegará de manera temprana por aproximarse una elección presidencial.
No es mucho el espacio que les queda a los presidentes municipales. Lo más aconsejable es que fortalezcan los cuadros para poder menguar la crítica, que en lo que se refiere a Temixco, es cada vez más notoria.
La población mantiene una constante observación sobre el quehacer público, hay una especie de silencio, que es muy inquietante. Ello es indicio de que no está contenta con lo que ha recibido y por lo tanto espera un esfuerzo mayor en lo que queda de Gobierno. Hay que dárselo, no hay de otra.