Por lo menos el aspirante panista, el senador Adrián Rivera Pérez, ha comenzado a advertir que eso difícilmente se podrá concretar y ello porque tampoco los resultados obtenidos a través de acuerdos de esta naturaleza fueron los esperados.
Pero no sólo por eso, realmente el PRD que encabeza Jesús Ortega Martínez, que es la parte negociada con el PAN y el Gobierno, se queda cada vez más solo, las bases militantes y simpatizantes se vienen aglutinando en torno al ex candidato presidencial de la izquierda Andrés Manuel López Obrador y bajo esas condiciones tampoco a la derecha le convienen acuerdos improductivos.
Lo que está pasando en el Estado de México es claro, la fuerza se la viene jalando el tabasqueño, tanto que ya se pide la salida del propio Jesús Ortega, a quien califican de traidor al interior del sol azteca.
En esa misma dinámica se encuentra el otro tabasqueño, Graco Ramírez Garrido Abreu, senador perredista del grupo de los "chuchos", igualmente aspirante a la candidatura del Gobierno de Morelos.
Sin embargo, buena parte de las estructuras funcionales del instituto político no olvidan que fue uno de los que legitimó la victoria electoral de la derecha por la Presidencia de la República en 2006 y ya hay movimientos tendientes a cerrarle el paso en sus pretensiones.
Se aprecia pues que a medida que nos acercamos a los tiempos electorales con rumbo a la justa del 2012, se van definiendo las tendencias y estrategias y lo más seguro es que no se podrá llegar a una alianza electoral.
Es decir, tanto el PAN como el PRD tendrán que ir solos y en esas circunstancias, las fuerzas que mayores expectativas ofrecen son la priista y la panista. El tricolor ha iniciado una nueva fase, va por la reestructuración de cuadros y dirigencias, mantiene una presencia territorial, consecuencia de las elecciones internas.
En lo que toca el PAN, por muy desgastado que esté, sigue siendo Gobierno estatal y federal y eso ofrece muchas ventajas ante los adversarios, sus figuras no ofrecen muchas expectativas, son ya cuadros envejecidos, pero tampoco los priistas pueden presumir en ese sentido, todavía no les queda claro por dónde pudiera salir el candidato.
Y como decíamos, del lado del PRD se va a seguir dando un enfrentamiento brutal entre las corrientes de López Obrador y Jesús Ortega, aunque a éste último lo vemos muy disminuido y quizás entrando el año sea obligado a dejar la dirigencia.
De todos modos, los amarillos tienen muy poco que ofrecer y los pronósticos son de menor competitividad a mediano plazo.
Claro, mucho impacto tendrá en el estado lo que ocurra en las elecciones para Gobernador de Guerrero y el Estado de México, en el estado sureño el panismo está prácticamente ausente, no tiene nada que hacer, la batalla es entre perredistas y priistas.
En el Edomex, no obstante las campañas que muestran un escenario apretado, las valoraciones más sensatas dan una anticipada victoria al PRI, aunque habrá que esperar como se mueven las fuerzas en los momentos claves.
Y esto es así, precisamente porque la famosa alianza que pretendían PAN-PRD se está desvaneciendo con el resurgimiento en ese estado de la figura de AMLO, se viene llevando toda la gente, de tal manera que a los azules ya no les es atractivo un acuerdo con Ortega Martínez.
Solos difícilmente podrán enfrentar la maquinaria electoral que ha venido armando el gobernador Enrique Peña Nieto y a pesar de fuertes golpes políticos e intrigas de sus adversarios, se mantiene en la cúspide de las tendencias electorales como prospecto a candidato del PRI a la Presidencia, ello necesariamente repercutirá positivamente a favor de su partido en la elección de mandatario estatal.
Pero insistimos, después de conocer lo que pase en esas dos entidades, podremos tener más amplio el panorama, para advertir por donde vendrá la tendencia hacia la elección de Gobernador en Morelos.
Pero reiteramos, las alianzas comienzan a mostrar su inviabilidad, por lo menos en nuestro estado casi están descartadas, hay más diferencias que coincidencias entre simpatizantes de izquierda y los de derecha, hasta ahora se vienen dando cuenta.