Bueno, incluso aquellos que parecieran no tener nada que hacer ahí se han debido sumar a fin de no quedar fuera de la jugada en caso de que, como se ve, la mayoría absoluta de las células de tendencia izquierdista se sume a este brazo que de ninguna manera es la del PRD de Jesús Ortega Martínez, que es la misma corriente del senador tabasqueño Graco Ramírez Garrido Abreu.
Decimos esto porque el pasado fin de semana tuvieron una reunión que denominaron ‘’Primer encuentro estatal de estructuras de organización’’, donde anunciaron el comienzo de los trabajos de formación de estructuras en todo el estado.
Es decir, van a la integración de los comités seccionales y municipales en las 33 alcaldías para que el tres de abril realicen una concentración estatal en la que mostrarán los alcances del trabajo de campo.
Esto tampoco es nuevo. Lo que diversas figuras de partidos muy distintos están reproduciendo son las estrategias que les dieron tantos resultados a los grupos de esa tendencia en las elecciones del seis de julio de 1988, cuando lanzaron a la presidencia de la república al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas con su Frente Democrático Nacional (FDN) y luego en el 2006 con Andrés Manuel López Obrador, con su frente amplio que igualmente sumó a varios partidos.
Pues lo interesante es que Luis Arturo Cornejo, su compañero de curul Rabindranath Salazar Solorio, Juan Salgado Brito, entre otros, lograron ya sumar a casi todos los personajes potencialmente fuertes de la izquierda.
En su proyecto, aparecen, entre otros, connotados abogados de la talla de José Luis Urióstegui, Hugo Bello Ocampo, ambos ex procuradores y ya aspirantes al gobierno del estado en el 2006 invitados precisamente por Graco que llegado el momento los traicionó y vendió al mejor postor.
Quizás por eso es que este útimo dijo al reportero: ‘’Vengo a reclamar la senaduría que me robaron en el 2006. Ojalá que en esta ocasión me la hagan efectiva’’.
Pero siguiendo con los asistentes a este evento, estuvieron el líder de Convergencia en Morelos y diputado federal, Jaime Álvarez Cisneros; el diputado local Fidel Demédicis Hidalgo, quien se viene distinguiendo por el endurecimiento de posturas frente al gobierno estatal; el edil de Jiutepec, Miguel Ángel Rabadán; el ex legislador federal Anastasio Solís Leso y Carmelo Enríquez, sólo por señalar a algunos. La verdad es que había de todo y de distintos tamaños.
Lo hemos venido advirtiendo, a pesar de que todavía no lo hacen público, este esfuerzo está directamente ligado a Andrés Manuel López Obrador o en su caso al jefe del gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard; ambos buscarán ser candidatos presidenciales y la verdad eso de que ya se enemistaron entre sí puede ser un cuento chino. Lo más seguro es que se trate de una estrategia política.
Y habría que aceptar que con esta cantidad de figuras ya con cierta experiencia política, por lo menos de cuadros para competir en la justa del 2012 no carecerán y de alguno de ellos bien pudiera salir el candidato a gobernador o alcalde de Cuernavaca y cualquier otra posición que quieran, porque, reiteramos, hay de todos los niveles y tamaños.
Y se me olvidaba, como decía al principio, aún aquellos que no comparten el rumbo de este movimiento por estar comprometidos con otros intereses, los de Graco, tuvieron que estar ahí, como el dirigente estatal perredista Luis Ángel Flores Bustamante.
Pero observamos igualmente a algunos perredistas desgastados y de no muy buenos recuerdos cuando fueron autoridad, como el ex edil de Temixco Javier Orihuela García y dos que tres más que, como decimos, se arrimaron porque saben que si la izquierda cuenta con algunas posibilidades de crecer, será por este lado. Por lo pronto, bien por Cornejo Alatorre quien fue el que abrió fuego en este asunto del frente.