Bueno, hasta donde tenemos entendido, esa disidencia interna está a punto de abortar una marcha que ya se está programando y que se orienta en la misma dirección y argumentos de las que hemos venido presenciando en otras latitudes.
Y es que entre los promotores de estos supuestos grupos de estudiantes en protesta no tienen muy buena imagen y antecedentes en la propia casa de estudios.
Uno de los estudiantes que informó al reportero sobre el caso dijo que “René Santoveña es un personaje mal visto por la mayor parte de los alumnos universitarios, durante su gestión se empezó a endeudar a la institución porque descuidó el cargo, el señor se la pasaba buena parte de su tiempo departiendo con un cerrado grupo de afines en bares y cantinas”. En efecto, hay mucho de verdad, el hombre por lo menos ha generado muy mala fama en ese sentido, hay incluso todavía anécdotas entre compañeros del gremio periodístico que cubrían la fuente informativa del gobernador en el sexenio pasado de Sergio Estrada Cajigal Ramírez. Uno de ellos, que estaba en el momento del diálogo con los estudiantes de la UAEM, dijo que “el entonces rector Santoveña acompañó a SEC a una visita al viejo continente y durante cuatro o cinco días que estuvimos en Francia y Alemania, nunca los vimos cuerdos, incluso tuvimos un problema, porque al término de los actos, nos íbamos a comer o cenar, pero el, con dos o tres acompañantes de su pandilla, consumían puro alcohol y al final exigían que pagáramos lo mismo, en varias ocasiones casi salimos de pleito”. Pues sí, el personaje enfrenta dificultades de imagen que aquí chocan con el sentimiento de los jóvenes que no lo ven bien y es una de las causas por las cuales se resisten a seguir su juego y a favorecer sus intereses.
Otro actor es Jorge Messeguer Guillén, ex legislador local, pero sin ninguna identificación con los morelenses, menos con la comunidad universitaria, lo que igualmente, provoca alguna desconfianza de los muchachos, muchos de los cuales dicen que no participarán en los eventos programados. En fin, hasta dentro de la máxima casa de estudios se libra una batalla bastante fuerte de quienes aspiran a gobernar Morelos y ello sólo muestra que a través de algunos maestros, estudiantes o autoridades hay penetración para intentar desde ahí generar inercias electorales.
Cuestionan desempeño en obras públicas
Por otro lado, ya veníamos advirtiendo de un descenso muy pronunciado en el desempeño de algunos colaboradores del gobernador y ello coincide con algunos empresarios de la construcción que se quejan de una falta de contratos de trabajo. Si, algunos de ellos señalan que en particular, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas (SDUOP) a cargo de David Enrique Turner, ha entrado prácticamente en parálisis y acaso viene dando conclusión a proyectos menores que no representan ningún estímulo a la falta de oportunidades de empleo. Y parece haber mucha razón en esas expresiones, salvo detalles que le quedan al proyecto del parque tecnológico en el municipio de Xochitepec, no hay ninguna inversión de relevancia a cargo de esta institución.
Esto inquieta a los constructores, que generalmente suelen ser beneficiados con contratos de obra pública y que hace buen rato han tenido que experimentar incluso en entidades vecinas ante la ausencia de acciones en Morelos.
Muchos proyectos que se daban por hecho quedaron atorados y en espera de mejores tiempos, entre ellos, el libramiento norponiente de Cuernavaca que hace años se anuncia como la solución a problemas de vialidad en Cuernavaca y la zona conurbada.
La autopista Siglo XXI que nunca logró pasar de los 6.5 kilómetros que le construyó Sergio Estrada Cajigal en su enlace con Puebla e incluso, la ampliación a cuatro carriles de la autopista La Pera-Cuautla, que fue motivo de golpes entre cetemistas y Nuevo Grupo Sindical, sigue detenida, lo que la Federación dice es que no hay dinero. Sólo queda la construcción del distribuidor vial del Polvorín, en Cuernavaca, pero va a paso de tortuga y los quejosos señalan que por el bajo ritmo que presenta, no se ha contratado maquinaria y equipo a gran escala.
El panorama en esa materia es un tanto desolador, la Secretaría de Obras ha bajado los brazos y decidido esperar pacientemente a que el sexenio termine, en particular este año fue de un elevado índice de improductividad, se echaron a dormir en la hamaca.